“Las circunstancias bajo las que se produce el asesinato a sangre fría del chofer no son dudosas sino inéditas”. Axel Kicillof rompió el silencio para respaldar a su ministro de Seguridad, Sergio Berni, después de la agresión que sufrió por compañeros del chofer asesinado Daniel Barrientos: el gobernador apuntó sus sospechas sobre Patricia Buillrich.

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"La mentira, la cobardía de no asumir la responsabilidad de los hechos, la búsqueda de culpables y la bestialidad de las palabras del gobernador, nos muestran que NUNCA LA VERDAD SERÁ PARTE DEL RELATO KIRCHNERISTA", le respondió minutos después la titular del PRO en Twitter, antes de pedirle la renuncia a Berni.

“El colectivo fue cruzado por un auto y subieron dos personas con armas de gran calibre. Parecía el robo de un blindado. Se llevaron solamente un bolso y una mochila”, describió el hecho el mandatario en una entrevista en C5N, realizada este martes por la noche, donde calificó el hecho como "muy raro".

Enseguida, Kicillof "ató cabos" entre la agresión a Berni con una visita de la presidenciable del PRO a La Matanza, la misma sospecha que había instalado su ministro horas antes. “Lo tengo que decir, unos días antes había estado Patricia Bullrich hablando de los colectivos. Lo mismo pasó con Cristina (Fernández de Kirchner). (Gerardo) Milman habló unos días antes del asesinato”, relacionó al recordar al diputado y exmano derecha de la exministra, involucrado en la investigación del intento de magnicidio de la vicepresidenta.

“Después les agresiones a Berni. ¿Qué se empezó a encontrar? Carteles similares a los de un acto de Patricia Bullrich. También colectiveros dijeron que las personas que agredieron al ministro no eran conocidas. Es raro”, detalló como una segunda evidencia del involucramiento de la exministra de Seguridad.

“Uno tiene que adelantarse pero si tiene una cola, cuatro patas y ladra... Vuelvo sobre lo mismo, hay que tener cautela. Hay que esperar a ver qué es lo que diga la Justicia porque hay algo extraño, tanto en el asesinato como en la agresión. En general, no le pegan al que va a poner la cara a la zona de conflicto", respaldó a Berni.

Además, Kicillof cargó las tintas sobre el ministro de Seguridad nacional, Aníbal Fernández, a quien Berni ya había apuntado. “A Aníbal lo escuche decir que no habíamos pedido gendarmes. Yo tuve reuniones con el Presidente (Aníbal Fernández), con la ministra anterior (Sabina Frederic). Habíamos pedido la geolocalización de los gendarmes y la coordinación con los gendarmes”, se quejó. "Hay que redoblar la lucha contra la inseguridad porque el delito cambió. Debemos atacar de otra forma”, cerró.