Luego de la dura derrota en las PASO de agosto, la presidenta llamó por teléfono al jefe comunal, Jorge Ferraresi. Le pidió explicaciones y le exigió que mejore la performance en octubre. En tanto, el massismo blanqueó la división en dos grupos.
Uno de los afectados por el virus del Frente Renovador fue el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, que cosechó 66 mil votos, poco menos del 30 por ciento del total y así resultó con la nómina más votada.
Sin embargo, el massismo se presentó con dos listas y sumando los sufragios de ambas, Massa se alzó con el triunfo en el distrito con el 35 por ciento.
Por eso, Ferraresi recibió un reto esta semana. Según contaron fuentes distritales a LPO, la propia presidenta Cristina Kirchner llamó al jefe comunal para pedirle algunas explicaciones sobre los resultados de agosto. Además, “le exigió que mejore la performance” para las generales de octubre, contaron las fuentes.
La división del massismo
En tanto, luego del pase del senador provincial Baldomero “Cacho” Álvarez de Olivera, en el Frente Renovador local quedaron dos espacios netamente diferenciados.
Uno de ellos es que el integran el, por ahora, presidente del Concejo Deliberante y primer candidato a concejal, Armando Bertolotto, y el titular del SECLA de Avellaneda- Lanús, Orlando Machado. En este grupo también está la presidenta del bloque, Sandra Alice.
El otro gran grupo terminó de conformarse en las últimas horas y está integrado por el propio Olivera, el diputado nacional y los diputados provinciales Mónica López y Jorge Scipioni.
Todos ellos darán una conferencia el lunes en la que blanquerán el acuerdo. A ellos se le suma el concejal José Alessi, que con su boleta corta de Unión Popular sacó 14 puntos en agosto.
Por eso, logró el respaldo de Álvarez de Olivera que decidió ayudarlo para las elecciones de octubre.
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