La ministra Cristina Álvarez Rodríguez recibió ayer a la primera tanda de concejales para enrolarlos detrás del gobernador; buscan generar una estructura propia con acuerdos en cada sección electoral de la provincia
Ayer, la ministra de Gobierno provincial, Cristina Álvarez Rodríguez, reunió en la gobernación a la primera tanda de concejales que se enrolará en subbloques bajo el lema "Scioli 2015" , una experiencia que lanzó como prueba en su territorio, San Martín, a fines de diciembre. Fue, sin vueltas, la acción más explícita desde que el mandatario reveló, hace casi dos años, su aspiración de llegar a la Casa Rosada.
Esta vez la convocatoria incluyó a ediles de la segunda sección electoral, que contó representación de casi de todos los partidos: de los 15 distritos, sólo faltaron emisarios de Pergamino, donde el oficialismo está liderado por Kolina, la agrupación de Alicia Kirchner; y Zárate.
"Antes se habló con los intendentes de cada lugar, al menos donde gobierna el Frente para Victoria, para no generar conflicto", explicó a LA NACION un funcionario, en un intento por subrayar el objetivo -nada fácil- de acumular poder en la base, sin chocar con los alcaldes.
El encuentro, realizado al mediodía, recorrió asuntos de gestión y pretendió reivindicar el rol de los concejales, en su condición de primera línea de contacto con los vecinos. Así, la ministra lleva adelante un pedido directo de su jefe: aceitar el vínculo con los municipios y contener las demandas desde abajo.
Por otro carril, el propio Scioli mantiene una agenda hiperactiva en la costa, con anuncios -como ayer, que anticipó inversiones en telecomunicaciones- y encuentros con gobernadores. En apenas cinco días, se vio con Francisco Pérez (Mendoza), Maurice Closs (Misiones), Gildo Insfrán (Formosa) y anoche charló, durante 45 minutos, con Juan Manuel Urtubey (Salta). Se cruzó, además, dos veces con el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri.
OPERATIVO CONCEJOS
Si bien la reunión de ayer fue concebida con una pátina institucional, quedó en claro el propósito de diseñar una plataforma rumbo a las elecciones presidenciales. Como encargado de coordinar el grupo en la segunda sección, Francisco Cafiero, nieto del histórico dirigente del PJ y funcionario provincial, refrescó el mensaje a los invitados: se reconoce la "conducción política" del intendente y, donde es opositor, la misión es aportar "herramientas" para crecer.
En la mesa, escuchaban, entre otros, los concejales Marcos Pernicone y Facundo Araguz (Arrecifes), Leonardo Peris y Esteban Sandio (Baradero), Pedro Proserpio (Capitán Sarmiento), Jorge Adame (Carmen de Areco), Pablo Pino (Colón), Diego Nanni y Gabriel Alí (Exaltación de la Cruz), María José Mendiburo (Ramallo), Ramiro Baguear (Rojas), Pedro Pérez y Gustavo Zanotti (Salto), Nicolás Marinkovic (San Antonio de Areco), Martín Baraybar (San Pedro) y Andrea Zucchella (San Nicolás).
La jugada en los concejos, además, engloba el fin de moderar la influencia de Sergio Massa, camino a la contienda presidencial. El creador del Frente Renovador sustenta su cruzada en conseguir el apoyo de intendentes y, así, colonizar ciudades salteándose la tutela de los gobernadores.
El sciolismo se propuso "peinar" el mapa completo de la provincia -los 135 municipios- en busca de adhesiones que, en los hechos, configuran un drenaje por goteo. La estrategia no contempla romper con la bancada oficialista en los concejos deliberantes, sino capturar aliados internos y, sin apartarse, generar espacios plenamente identificados con la candidatura de Daniel Scioli. El puntapié de la tarea lo dio la agrupación Peronismo 2020, pero trabajan en esa línea el resto de las fuerzas que reportan al gobernador, como la DOS, Grupo Descartes, La Juan Domingo y Peronismo Sin Fronteras, entre otras.
En el cronograma que elaboran en La Plata figura un encuentro con ediles de la séptima sección para el próximo miércoles. En febrero se enfocarán en las conversaciones con la cuarta y la quinta, y planifican una presentación en Rojas, distrito comandado por el massista Martín Caso, a modo de plantar bandera en un municipio enemigo. Recién después avanzarán sobre la primera y la tercera, donde se emplaza el poderoso conurbano. Ese bastión, por densidad poblacional y peso de los intendentes, es la superficie más fangosa para la tropa sciolista.
COINCIDENCIAS Y AMBICIONES COMUNES CON URTUBEY
MAR DEL PLATA.- Los gobernadores de Buenos Aires, Daniel Scioli, y de Salta, Juan Manuel Urtubey, siguieron de reojo la cadena nacional de la Presidenta, ayer, en el hotel Hermitage, donde dialogaron 45 minutos sobre el panorama económico y político. El encuentro también dio lugar para que el mandatario salteño se riera del elevado "retoque" digital en las fotos que distribuye Scioli sobre sus partidos de fútbol, lo que derivó en un desafío del ex motonauta, que prometió viajar a Salta. A la salida del hotel, coincidieron a la hora de compartir sus ambiciones por llegar a la Presidencia, en 2015. Cada uno cono su estilo, claro. "Es la ambición de todo dirigente político", confirmó Urtubey, sin dudar. Scioli, en cambio, jugó al sobreentendido: "Lo que tenía que decir en su momento ya lo dije". Por la noche, en TN, confirmó su propósito de postularse.
UNA TÁCTICA CON TRES PATAS
Gobernadores
Scioli se recuesta sobre el PJ y busca apoyo en los mandatarios para apuntalar su plan presidencial.
Agrupaciones
Con el fin de ordenar, prevé unificar todas las organizaciones que le reportan bajo un mismo paraguas.
Territorio
Busca aceitar el trato con intendentes y, a la vez, despliega un operativo para sumar concejales propios.
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