No todos los comercios aplican la suba. Bajó el consumo y la elaboración por el aumento en los insumos y servicios públicos.
No llegó a cumplirse un mes del último aumento del pan y sus derivados, que ya se vino el aumento de junio. Está en vigencia la nueva lista de precios sugeridos, aunque "alguna" panaderías no subieron el 20 % que representa el nuevo aumento.
El Centro de Industriales Panaderos de la Provincia dio a conocer que la lista de precios está en vigencia.
Este segundo aumento del año se produce dado que al sector panadero "se le hace imposible seguir afrontando los costos de producción".
Además expresaron que en el último mes el costo del servicio de energía eléctrica sufrió un aumento del 100 por ciento, el gas por red más de un 800 por ciento y los insumos de panadería, de un 40 por ciento. "Los aumentos representan un gran incremento en el costo", precisaron.
Los precios sugeridos del pan son: el kilo de pan miñón con un costo del 32 pesos; el de pan negro, 36 pesos; el de pan, 40 pesos y el de pan rallado, 36 pesos.
En tanto, el kilo de bizcochos pasó a costar 52 pesos, el kilo de bizcocho especial 100 pesos y cada factura, 6 pesos.
El paquete de pan de viena por 6 unidades tendrá un costo de 14 pesos; 18 pesos el pan para hamburguesa y 14 pesos cada una de las prepizzas.
Aumento de servicios
El nuevo aumento del pan hace resentir más la canasta familiar, que en estos dos últimos meses sufrió el golpe también de los servicios públicos, un porcentaje que responde a la situación inflacionaria que atraviesa el país.
El Tribuno de Jujuy realizó un recorrido por algunas panaderías de la capital y los vendedores manifiestan que hubo una baja en la venta en las últimas semanas.
Además algunas destacaron que se produce un poco menos, por la razón que cayó un poco el consumo y los costos de elaboración se elevaron. Así también se pudo saber que algunas panaderías son parte de la demanda colectiva que fue presentada por las Asociaciones de Defensa de Usuarios, ya que los aumentos en el gas y energía que inciden directamente en la elaboración del pan, son exorbitantes. Dueños de panaderías, esperan que el Estado intervenga, porque la situación inflacionaria se hace imposible sostener. A esto se le suma el salario, el cumplimiento con los convenios de trabajo y que no podrán sostener en los meses siguientes.
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