El concejal de UNA, Atilio Roncoroni, destacó que los trapitos que cobraban estacionamiento en las inmediaciones del cicrcuito municipal de motos no estarán por su propia intervención y no poque la comuna haya articulada alguna acción concreta. 

En dialogo con SECTOR INFORMATIVO, el edil y también abogado, indicó que la situación se pudo destrabar gracias al envío, por parte del bloque de concejales que encabeza en el HCD local, una carta documento a la Agencia de Seguridad Vial de la Nación, solicitándole que haga valer la ley que prohíbe el estacionamiento sobre las banquinas de la ruta 11.

"Estamos contentos que hemos conseguido que la ruta se pongo de acuerdo a la ley. Esto no es contra el trabajo geselino sino que queremos, justamente, defender la mano de obra local. Lo que queremos es que de una vez por todas se le otorgue el estacionamiento en los campos de Madariaga, en el marco de un acuerdo regional, a todas las instituciones de bien público de Villa Gesell, Pinamar y General Madariaga y que todos tengan trabajo", resaltó el edil. 

"Hemos conseguido que la municipalidad reaccione. Desde el Gobierno dicen que yo les corte el trabajo a muchos y desde entonces me estan mandando mensajes insultándome, diciendome que les estoy sacando el trabajo. Les estan diciendo que por culpa mía no van a poder ganar plata. Nosotros no estamos privando de un negocio a los geselinos sino que perseguimos una actividad ilegal", agregó.

"Nosotros, con la intimición que le hicimos a la Agencia de Seguridad Vial y nuestra publicación en el Facebook, le marcamos la agenda al intendente, quien se pone un poco nervioso, y entonces salió hacer lo que tenía que hacer. Si nosotros no mandabamos la carta documento seguro que hoy los trapitos estarían allí como estaban el lunes", remarcó el edil y para sumar un poco más a la polémica agregó "está bueno que tanto el intendendte Barrera como el secretario Valdéz cumplan con la ley".

Hoy la comuna anunció, con bombos y platillos, que gracias a una acción conjunta con las comunas vecinas y la policía, el Enduro ya no tendría a los trapitos exigiendo dinero en la ruta para estacionar los autos. Ese negocio representaba una actividad ilegal de miles y miles de pesos extorsivos que era pasada por alto por la comuna y las fuerzas de seguridad. Roncoroni dice que los trapitos no estarán por su intervención. ¿Quién tiene razón?