De igual modo se indicó que aún no hay reemplazantes en el Ministerio de Industria, que dejaría Sebastián Agostini, y en el Nuevo Banco del Chaco, donde podría haber algunos cambios pero no hay más que trascendidos respecto de quienes integrarán el directorio y la sindicatura. Bacileff Ivanoff fue claro al respecto “el tema está en estudio”, lo que dijo “no implica que necesariamente habrá relevos. Esa es una cuestión a decidir. Ningún rumor o nombre salió de este despacho”.

Lugo asumirá el Ministerio de Desarrollo Social.

Cambios en Cultura

Por otra parte se supo que la presidente del Instituto de Cultura, Silvia Robles, presentó su renuncia. El resultado de la gestión del organismo no satisfizo al nuevo gobernador y evaluaba cambios. De los actuales integrantes del directorio quedaría solo uno de ellos a pedidos de un numeroso grupo de jefes comunales peronistas y otros dos entre ellos el presidente serán propuestos en las próximas horas por Bacileff.

El ahora jefe del Poder Ejecutivo provincial no sería partidario de que los actos de jura de los nuevos funcionarios se transformen en actos públicos sino más bien formales y reservados aunque de libre acceso a los medios de prensa. Así quiere bajar el perfil a estos acontecimientos, dado que son designaciones transitorias en función de que el titular del gobierno provincial ejerce la Jefatura de Gabinete por un tiempo indefinido, que puede o no llegar al 10 de diciembre de 2015.

Brunswig será designado en Planificación y Ambiente.

Efectivamente, el gobernador Bacileff Ivanoff bajó el perfil informativo a la tarea que lleva adelante y oficialmente no dieron más que los nombres del ministro Lugo y del vocal de Lotería Chaqueña, Manuel González, quien reemplazará desde el 10 de diciembre a Néstor Avalle, flamante director designado de la Autoridad Federal de Servicios Comunicación Audiovisual (AFSCA).

Si volvió a trascender que “pedirá el cumplimiento de metas, efectividad en la tarea, eliminación de burocracia innecesaria y que esto debe redundar en la eliminación de gastos tan innecesarios como superfluos y una dedicación permanente” y que “si bien puede haber errores, como sucede en toda tarea y la actividad gubernamental no es ajena a esa posibilidad, de ningún modo se permitirá que los funcionarios políticos no cumplan responsabilidades durante todo el tiempo que fuera necesario”.