Desde la embajada de Ecuador en Londres, el creador de WikiLeaks dijo que su situación tardará “de 6 a 12 meses” en resolverse. Afirmó que Estocolmo “dejó de ser neutral”
Assange estimó que su situación se resolvería por medio de gestiones diplomáticas o como resultado de "un hecho inusual", según declaró en un reportaje exclusivo para el canal ecuatoriano Gama TV y el internacional Telesur.
"Acontecimientos mundiales impredecibles como podrían ser una guerra de occidente con Irán, la elección presidencial en los Estados Unidos y el abandono del caso por parte del gobierno sueco", explicó.
“Creo que éste último sería el resultado más probable”, indicó Assange, quien goza de asilo diplomático de Ecuador y es reclamado por la justicia sueca por denuncias de abusos sexuales.
Por otro lado, consideró que el país escandinavo ya no es un buen ejemplo para el mundo. Y argumentó su opinión mediante un cable enviado por el embajador de Estados Unidos en Estocolmo en 2007, con el título “Suecia ha consignado la neutralidad al tacho de basura de la historia”.
Luego, añadió que Suecia “está en más de 100 de comités de la OTAN” y sus fuerzas se encuentran “bajo el mando de los Estados Unidos en Afganistán”.
Ese país “fue el quinto en Libia con aviones”, denunció Assange en referencia a la intervención de la OTAN en la revuelta contra Muammar Khadafi en 2011, y señaló que es el mayor fabricante de armas per cápita del mundo.
Assange, que está refugiado desde junio en la embajada ecuatoriana en Londres y tiene asilo desde agosto, pero no puede salir por falta de un salvoconducto británico, reiteró que él y WikiLeaks son objeto “de una persecución política de Estados Unidos y de sus aliados”.
WikiLeaks ha divulgado miles de cables diplomáticos confidenciales con opiniones comprometedoras, especialmente de Estados Unidos.
En las últimas semanas Ecuador ha recibido el apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA), la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) por una supuesta “amenaza” del Reino Unido de irrumpir en la embajada para arrestar a Assange.
Assange aseveró que ese respaldo fue “una sorpresa placentera”. Y dijo: “Todos en América Latina salieron a apoyarnos, incluso esos grupos relativamente de derecha en algunos países”
Tras las resoluciones de los organismos regionales, el Reino Unido y Ecuador han reanudado el diálogo sobre el tema y esta semana lo trataron en Londres el ministro británico de Exteriores, William Hague, y el vicepresidente ecuatoriano, Lenín Moreno.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dijo que “puede ser mañana que se resuelva esto, o meses, o años”
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