Situación del predio de disposición final de residuos

“Lo que se viene haciendo en el predio es un proyecto que se presentó en 2006 de relleno sanitario y tratamiento de líquidos para eliminar el riesgo del impacto donde se disponen esos residuos. Había información incorrecta que aseguraba que era un basural a cielo abierto. El relleno sanitario tiene una infraestructura y una inversión que impide la contaminación de los suelos y el basural a cielo abierto es un lugar donde se colocan residuos y traspasan las napas”, aclaró.

Y añadió que “me parece que está claro que el predio es un relleno sanitario y es importante. La gran diferencia es que al principio de la operación obviamente no había basura o era muy bajo. Hoy, diez años después, estamos culminando el módulo 1 y ya proyectando el pliego para construir el Nº2 y por eso uno se encuentra con otro volumen de residuos en el lugar. Todo ese trabajo se hace de acuerdo al proyecto original y con las condiciones que corresponden”.

Proceso de licitación

“Necesitamos licitar la operación de mantenimiento de este predio, incorporamos algunas cuestiones de mejoras ambientales, con tecnologías que disminuyan el volumen de los residuos. También hay otros temas de control como monitoreo con una periodicidad que nos permita tener un registro. Hoy el pliego está en tratamiento en el Consejo y pasará por distintas comisiones, desde Emsur estamos dispuestos a evacuar dudas para que ese pliego pueda salir en término y que se pueda licitar”, indicó.

Además, D’Andrea se refirió a otro de los temas polémicos, que tiene que ver con el trabajo que hacen allí las cooperativas. “La cooperativa CURA trabaja en un predio del Emsur cedido en comodato, tiene una cinta transportadora donde clasifican los residuos que llegan. Es un convenio donde ellos pueden reciclar ese material y entendemos que ese lugar tiene un potencial mucho más grande, por eso realizamos una serie de inversiones para reparar esa cinta, que hace muchos años está operativa. Nos encargamos de hacer las reparaciones y la visión que tenemos es un lugar donde puedan trabajar al menos 150 personas y que se recupere el material de residuos domiciliarios”, precisó.

“Este pliego es de servicios, e intenta delimitar cuestiones de operaciones y mantenimiento del Centro de Disposición Final de Residuos. En cuanto a las obras, decidimos que se contrate de manera independiente. Estamos tratando de gestionar con el Ministerio de Ambiente de la Provincia alguna mejora en las instalaciones donde trabaja la cooperativa CURA”, manifestó.

Separación de residuos en origen

“Hoy estamos impulsando una campaña de separación y no creo que la gente haya dejado de separar, con la cooperativa CURA eso se ve mucho, porque los martes y viernes se ven muchas más bolsas de las que se veían antes. El que asumió el hábito de separar es muy difícil que lo deje. Es mucho más fácil para ellos recuperar el material si este se separa. Aún estando en un nivel que no es el que quisiéramos, el nivel de separación es muy importante”, dijo.

Y por último, se refirió a la contenerización de residuos en la ciudad, expresando que “la experiencia con algunas pruebas de piloto de contenerización arrojó que no es la solución para lo que necesitamos“.

Escuchá la entrevista completa que le hizo el periodista Gastón Triszczuk a Sebastián D’Andrea en Brisas Segunda Edición