Los docentes bonaerenses cumplieron este viernes con "elevado acatamiento" la segunda jornada de un paro de 48 horas en reclamo de mejoras laborales, según aseguraron los gremios. Sin embargo, la directora general de Cultura y Educación provincial, Nora De Lucía, calificó a la medida de fuerza como un "paro turístico".

La funcionaria consideró que los sindicatos tienen "una agenda de paros por el paro mismo, que obedece a la justificación de una política gremial y de afiliación, sacrificando a los chicos".

Pero la respuesta no tardó en llegar y la titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, acusó a algunos funcionarios del Ejecutivo provincial de "defenestrar" a los docentes que reclaman. Además, sostuvo que con esos "calificativos injustificados" lo que hace De Lucía es "subestimar y desconocer el malestar".

Las cinco entidades que integran el Frente Gremial Docente Bonaerense (SUTEBA, FEB, UDA, AMET y SADOP) afirmaron que el paro fue convocado ante "la ausencia de respuesta del gobierno provincial a los reiterados reclamos de los trabajadores de la educación por el pago de los salarios adeudados".

Los docentes también demandan "el pago de todos los retroactivos, la convocatoria a la comisión técnica salarial (paritaria), la urgente elaboración del decreto de equiparación de las asignaciones familiares, la discusión del salario para 2013 y la solución a la grave situación edilicia de los establecimientos".

"La contundencia de la medida habla por sí misma del verdadero sentir de los docentes. No puede ser que el 97% tenga intencionalidades políticas", sostuvo Petrocini.

No obstante, la dirigente aclaró que "el paro es la última instancia del reclamo" y agregó que los gremios estarán dispuestos al diálogo en la medida que "el Ejecutivo convoque a una reunión".

"De esas reuniones debe salir algo", añadió Petrocini, quien adelantó que el Frente solicitará una reunión con el gobernador Daniel Scioli.