Con mayoría de mujeres electas, quedó ayer conformado el nuevo Consejo de Administración de la Cooperativa de Agua de Villa de Merlo. Por una moción que tuvo un amplio apoyo, se decidió destituir a los actuales consejeros y elegir a los nuevos representantes. La votación tan rudimentaria como los propios caños que llevan el agua subterránea a los domicilios, muestran que la entidad está lejos de estar a la altura de los nuevos tiempos.

Los asambleístas fueron convocados para las 14, y a pesar de que la presencia fue numerosa, se estima que unos 260 asociados, estuvo lejos de otras asambleas, también atravesadas por crisis institucionales e hídricas. Además, el actual sistema de representación expresa a una parte mínima de los asociados. Si hay 11.000 medidores de agua en Villa de Merlo, quienes participaron de la toma de decisiones equivalen al tres por ciento de los usuarios.

La convocatoria tuvo también todos los condimentos de la rosca partidaria local. Es que para algunos dirigentes ligados a la clase política local la entidad no deja de ser un botín apreciable para sus propias aspiraciones. Por eso, algunas posturas que se escucharon en las instalaciones estaban más ligadas a los intereses partidarios que a un interés genuino de conducir la cooperativa.

A pesar de eso, los asociados que no pertenecían a sectores partidarios equilibraron la asamblea. Se decidió no aprobar ni la memoria ni el balance, como tampoco el aumento de la tarifa. Al momento de la elección triunfó una moción que estaba en línea con lo que quería un sector de la UCR y del Gobierno Municipal, moción que hizo el actual Jefe de Gabinete, Bruno Mini: barrer con el actual Consejo de Administración y elegir nuevos representantes. Así fue aprobado y tras esa aprobación algunos asociados se retiraron de la asamblea.

Después, se hizo cargo de la asamblea un asociado, cuyo nombre ya había sido consensuado el día anterior si es que la moción de Mini prosperaba. El momento kafkiano llegó con la votación a mano alzada y contando uno por uno los votos de los que se propusieron para consejeros. Los asociados eligieron a ocho mujeres sobre nueve para el nuevo Consejo de Administración.

La más votada fue María Belén Gurruchaga con 141 votos. Después Oscar Altamirano (139), Gladys Ray (136), Marcela Moreno (126), Miriam Garelli (123), Mariana Grosso (113), Cecilia Cornejo (109), Gisela Arias (106) y Laura Marangoni (103).  Como suplentes quedaron Carlos Dellagiovana, María Aguilar y Gerardo Orengo. Delia Paturlanne será la sindico titular.

A partir de ahora y por dos semanas será el traspaso con las actuales autoridades. En ese lapso, los nuevos consejeros deberán elegir entre ellos al nuevo presidente, secretario y tesorero.