Además, el 92 por ciento de los argentinos utiliza lámparas de bajo consumo y el 80 por ciento reconoce que cuida el agua. Los datos corresponden a un estudio realizado por Kantar Worldpanel.

En menor medida, sólo el nueve por ciento de la población prioriza marcas que ofrecen envases de cartón y un seis por ciento evita comprar productos que vengan en envase de plástico.

A mayor nivel socioeconómico, existe una mayor conciencia y preocupación por el medio ambiente.

Los hogares con un alto nivel de preocupación por el medio ambiente llevan a cabo acciones que implican cambios en su estilo de vida pues lo sienten como un deber y también una responsabilidad como ciudadanos del mundo.

En los hogares de nivel medio existe cierta preocupación por el tema, pero no creen que su acción individual tenga un impacto significativo en el medio ambiente.

En este sector de la población se muestran más dispuestos a sacrificar estándares de consumo por un bien mayor: preservar el mundo para futuras generaciones.

Mientras que los hogares de baja preocupación tienen hábitos que no contemplan el cuidado del medio ambiente.

Sin embargo, estos hogares llevan adelante algunas acciones como ahorrar energía y no desperdiciar agua potable, siempre y cuando no impliquen un sacrificio para su vida diaria.

Sin importar el nivel de preocupación por el medio ambiente, todos los encuestados estuvieron de acuerdo en que las empresas deberían trabajar el tema de sustentabilidad y ahorro de recursos, pero también mostrar un mayor compromiso social, en referencia a generar puestos de trabajo y abrir oportunidades para los jóvenes.