Los concejales aprobaron una suba en la tarifa y la empresa prestadora del servicio, que mantiene la medida de suspensión sobre 20 choferes, la rechazó por "insuficiente". Durante el fin de semana no hay colectivos dentro de la ciudad.
Los choferes, acompañados por dirigentes de UTA Mar del Plata, fueron al edificio de Tritones 90 con la intención de expresar su malestar por haber sido suspendidos provisionalmente en sus tareas. De todas maneras debieron manifestarse durante toda la sesión desde afuera, ya que se implementó un fuerte dispositivo de seguridad en las inmediaciones del edificio que les impidió el acceso. Sólo pudieron ingresar legisladores, medios de prensa y el gerente local de la empresa Montemar, Carlos Verón.
Los incidentes se desataron de a poco, a medida que corrían los minutos y se acrecentaba la impaciencia de los empleados. Los trabajadores intentaron subir al primer piso, donde sesionaban los concejales pero la policía comunal de Pinamar, con refuerzos de efectivos de la región, les impidió el paso y hubo una serie de empujones y gritos. Luego, llegaron las bombas de estruendo, los bombos y redoblantes, y los cánticos dirigidos a los ediles de la oposición, quienes finalmente sancionaron el proyecto.
El debate
Al momento de tratar el expediente sobre el aumento de tarifa para Montemar se vivió un acalorado debate en el recinto. El concejal Daniel Lamas (MUPP) mocionó que el valor tope sea de 4 pesos y manteniendo una cuponera con boletos a $3,40, moción apoyada por su compañero de bancada, Hernán Muriale, dado que consideran que de esta manera se destrabaría el conflicto. Fernando Avila (UCR) aclaró que el proyecto, finalmente aprobado, establece una tarifa provisional hasta tanto se realice una audiencia pública y que sea este mecanismo democrático el que defina el valor del boleto. Edgardo Paso, por su lado, planteó la inflexibilidad que la empresa muestra, ya que se ha plantado en un boleto de 4 pesos o nada. Además, mocionó un cuarto intermedio para hablar con los representantes de la firma, a fin de destrabar el conflicto pero no fue aceptado. En consecuencia, se procedió a la votación del proyecto de ordenanza, que resultó aprobado por ocho votos positivos y dos negativos (Lamas y Muriale). El mismo dispuso un boleto de 3,75 pesos a partir de la promulgación de la ordenanza con la implementación de una tarifa diferenciada para residentes que deberán presentar su DNI donde conste domicilio en el partido de Pinamar con un sistema de cuponera de compra anticipada, de diez o más boletos, con un valor de 3,40 pesos por pasaje.
El argumento esgrimido por los concejales para la determinación de ese valor se sustentó en que "se ha confirmado que en el Partido de La Costa el aumento ha sido de 3,50 pesos, que el Partido de Villa Gesell se ha establecido la tarifa de 3,50 pesos, y a partir del 15 de marzo las tarifas de los partidos citados vuelven a su valor anterior a dicha fecha, mientras que el Partido de Pinamar tiene la misma característica y por el cual el desgaste y gasto de los colectivos es el mismo". También que "los trabajadores pinamarenses que deben trasladarse desde el norte de Pinamar deben utilizar dos colectivos para llegar a sus lugares de trabajo, por lo cual son cuatro boletos por día" y que los concejales deben tener en cuenta que "los grupos familiares deben trasladarse entre las distintas localidades y las tarifas del servicio público deben contemplar el interés general y no el particular de una empresa monopólica como Montemar al mantener la exclusividad en el servicio zonal".
Asimismo, recordaron que "la empresa Montemar SRL ha incumplido la ordenanza 3886/10 para que incluyera en su recorrido las salas de primeros auxilios de Ostende, Valeria del Mar y el Hospital Comunitario de Pinamar como así también el recorrido interurbano de Villa Gesell que pasa por Ostende".
Sin servicio
Frente al rechazo por parte de la empresa de la nueva tarifa, los choferes de Montemar continuarán sin prestar servicio en el Partido de Pinamar a raíz de la suspensión preventiva de 20 empleados que realizó la empresa, ante la imposibilidad económica de sostenerlos en base al actual valor del pasaje, según se argumentó. Los delegados de UTA Mar del Plata, Sergio Medina y Pedro Fernández, acompañaron la postura de los manifestantes que estuvieron a punto de quemar gomas en la puerta del HCD. Una vez concluida la sesión, un grupo de representantes fueron recibidos por algunos concejales, pero se mantuvieron las posiciones de ambas partes y por lo tanto tampoco hubo micros durante el fin de semana, aunque se restableció con normalidad el interurbano que une las localidades de General Madariaga, Pinamar y Villa Gesell.
El conflicto con la empresa tuvo inicio a principios de este año cuando el Concejo Deliberante dio de baja a una ordenanza aprobada por el cuerpo en diciembre de 2011 que había autorizado una tarifa de 4 pesos pero que a partir de esa decisión, regresó a 3 pesos. Luego, ocurrieron varios intentos empresariales de insistir con el aumento que nunca tuvieron respuesta favorable hasta que a lo largo de la semana se conoció la decisión de suspender a los empleados.
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