Se refería a quienes aprobaron la división de Chascomús y fue pasado a comisión - Hubo gritos e insultos desde la barra y el Cuerpo debió entrar en cuarto intermedio Tampoco hubo referencias a los dichos desafortunados del jefe Departamental Raúl Nievas - Algunos ediles aceptaron las creación del nuevo Partido de Lezama y afirmaron que se debe discutir sobre la ley aprobada.
Es que ese era el tema sobre el cual, los vecinos querían expresiones claras de los concejales, como así también, sobre la actuación policial y los dichos desafortunados del jefe Departamental Raúl Nievas.
En primer lugar se aprobaron los nueve despachos de comisiones, entre los que se contaba el presupuesto 2010, de más de 96 millones de pesos, el que salió consensuado con algunas modificaciones en partidas, siendo la más importante, el cambio de destino a $ 200 mil de la Secretaría Privada, que fueron destinados al Pequeño Hogar La Casita, con el fin de reparar la equivocada decisión política del Ejecutivo Municipal que no actuó adecuadamente en esta cuestión hace algunos meses, según lo refirió la edil Andrea Arbeleche.
Pero llegó el momento de tratar el proyecto de Resolución presentado por el bloque de Unión-PRO propugnando "Declarar personas no gratas en el partido de Chascomús al Sr. Gobernador de la provincia de Buenos Aires Daniel Scioli, y a los 58 diputados provinciales" que votaron afirmativamente la división de nuestro territorio.
La gente que poblaba la barra se vio sorprendida porque rápidamente el cuerpo pasó la iniciativa a la Comisión de Reglamento por 13 votos a 1, lo que hizo que los vecinos reclamaran a los ediles que actuaran a la altura de las circunstancias, "poniendo lo que hay que poner" y fijando posiciones claras. Al respecto cabe acotar que las comisiones no se han conformado.
César Echevarría hizo una breve reseña histórica aludiendo a la falsedad de la restitución histórica a la que se alude por parte del gobierno provincial, procurando evitar la ola de pedidos de autonomía que se avecina.
También se refirió a la honorabilidad de la legislatura y de sus integrantes, y sostuvo que debe considerarse personas honorables a Favaloro y Leloir pero no a estos legisladores y al reclamar que se nombre personas no gratas a Scioli y 58 diputados, su mensaje se cerró con un largo aplauso del público presente.
Rodolfo Pertusi sostuvo que el presentado, era un proyecto demagógico y recordó que la división fue votada por el frente para la Victoria y el PRO y con ese mismo sentido, se tendría que actuar incluyendo a los legisladores que votaron dos veces antes el proyecto autonomista y a quienes "cajonearon" la Ley Marco.
Sostuvo el concejal radical que sería un grave error que el Concejo se expida en este sentido ya que nos dejaría en una posición desventajosa a la hora de poder establecer reuniones para "sentarnos todos juntos" con las autoridades provinciales aunque reconoció tácitamente que se debe discutir sobre la ley aprobada, lo que no era aceptado por los vecinos desde la barra y que no admiten la división del Distrito bajo ningún punto de vista.
Como ya se había aprobado que el proyecto se analice en comisión, la gente mostró su insatisfacción por no haber mostrado los ediles posiciones claras sobre el tema, y mientras se pasaba a un cuarto intermedio, los concejales eran tratados de "basura", "ignorantes", "soberbios" y exigieron respuestas pidiendo "que nos miren a la cara" y no se mantengan de espaldas a la gente.
Solamente Adolfo Aldabe y César Echevarría se acercaron a la gente a dialogar y poco después de reanudó la sesión para avanzar en otros temas, sin que se volviera a hablar de la división territorial, ni del pensamiento de los concejales sobre las expresiones del Comisario mayor Raúl Nievas hacia la gente en una conferencia de prensa.
No faltaron expresiones de repudio por el accionar de los concejales y pidieron cantando "Que se vayan todos".
Finalizada la sesión, los concejales Auzoverría, Echevarría, Mouján y Arbeleche se acercaron a la barra para hablar con la gente, en tanto se intentaba por parte de los ediles, que dos representantes de la gente se acercara a conversar con ellos, lo que no fue aceptado por los vecinos.
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