El encuentro de intendentes peronistas del Conurbano que se iba a realizar el sábado pasado en la Costa Atlántica para definir si apoyaban la candidatura a la reelección del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, finalmente se suspendió, porque ya no hay dudas sobre ese apoyo al darse de baja la alternativa. El respaldo de los jefes comunales, tanto del Gran Buenos Aires como del interior provincial, sustenta el proyecto de Kicillof de lanzarse hacia un nuevo mandato.

Tal como lo viene informando diario Hoy, el mandatario bonaerense se inclina por renovar su mandato y suma adhesiones en ese sentido. Otra posibilidad era que optara por una candidatura presidencial, convirtiéndose así en la esperanza del Frente de Todos (FdT) ante el anuncio de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, de que no será “candidata a nada” en los comicios de este año.

Pero esa alternativa, que ubicaba al jefe de Gabinete provincial, Martín Insaurralde, como número puesto para suceder a Kicillof en el sillón de Dardo Rocha, fue desactivada. El propio Insaurralde dictaminó que el mejor camino lo marca la carrera reelectoral del gobernador.

Desde hace varios meses, Kicillof viene recibiendo el respaldo inequívoco de intendentes peronistas del interior bonaerense. Julio Marini, de Benito Juárez, picó en punta, y luego se sumaron alcaldes de distintas secciones electorales, con manifestaciones individuales o declaraciones conjuntas. En general, señalan que están contentos por la fuerte inversión que la Provincia está haciendo en obras públicas en los municipios.

En el Conurbano, los jefes comunales suelen tener presupuestos que los hacen un tanto más independientes de las decisiones del gobierno provincial y pueden implementar por su cuenta obras de importancia, por lo que no se había dado hasta ahora un respaldo colectivo a la reelección de Kicillof. Pero en las últimas semanas, intendentes como Jorge Ferraresi, de Avellaneda, Juan José Mussi, de Berazategui, o Julio Zamora, de Tigre, explicitaron el visto bueno.

Mientras tanto, Insaurralde (ver página 4) y el propio Kicillof buscan que Cristina juegue un papel importante en el proceso electoral. “Te necesitamos”, le dijo el gobernador a la vicepresidenta en el recordado acto en Avellaneda, en diciembre pasado.