Comenzó diciendo el dirigente vecinalista, que: “Actualmente la UVC tiene alrededor de 300 afiliados, y es un número que se ha mantenido estable a lo largo del tiempo. Los partidos conservadores han ido desapareciendo, por lo tanto Lobos es uno de los pocos distritos donde todavía sigue vigente. Muchos de esos partidos han sido absorbidos por una estructura más grande, como es el caso del PRO.  Pero si hablamos de una agrupación vecinal, debemos ser el único en la Provincia. Acá también está Primero Lobos, por ejemplo, pero que no está identificada con el conservadorismo”.

“Lo que hemos hecho nosotros con el PRO o con J X C, es participar de nivel electoral con ellos, y competir en las elecciones bajo ese “paraguas” que se creó para ese fin. Básicamente, son alianzas con objetivos electorales, y podemos llegar a acordar pero siempre manteniendo nuestra autonomía. Por eso, antes de cada comicio, tenemos que ratificar si vamos a participar como alianza o no”, añadió.

“Personalmente no me considero un neoliberal. Sí un liberal, y adhiero a sus ideas, que van más allá de lo económico. Es mucho más complejo: Implica el respeto a las libertades individuales, a la libertad de prensa… Y lo de “neo”, es una etiqueta que nació en los ’90 cuando gobernaba Menem, y a su vez no se diferencia mucho del liberalismo clásico. Por supuesto que el tiempo pasa y que hay muchas cosas que cambiaron respecto al siglo XIX, pero en líneas generales estoy de acuerdo con los principios básicos de la doctrina. Lo que pasó en los ’90 es conocido: Menem tomó medidas de corte liberal a nivel económico y por eso tuvo la simpatía y las adhesiones que no eran del PJ ortodoxo. Lo que sí es cierto es que muchas variables, sobre todo con las personas que pertenecían a empresas del Estado, que no se tuvieron en cuenta o no les importó. Y eso generó desempleo. No había una red de contención social como existe ahora, ni asignaciones familiares, ni subsidios”.

“Yo no voy a hacer un alegato en defensa de Macri porque todos conocen mi pensamiento, pero estoy convencido de que, si hablamos de obra pública, se logró frenar o al menos reducir el despilfarro de los sobreprecios como estamos viendo ahora. Se consiguió hacer obras de calidad a un costo menor del que realmente se facturaba. En un país como el nuestro, la economía incide mucho en el voto y pienso que si en los últimos dos años de mandato,  Macri le hubiera encontrado el rumbo, probablemente hubiera sido reelecto. Porque si vos mirás los números de 2019, vas a ver que, así y todo, superó el 40 % de los votos”, apuntó el entrevistado. “Coincido, sí, en que los servicios de inteligencia deben destinarse a la seguridad interior y no a espiar opositores, y espero que Justicia se expida, más allá de que creo que muchas de esas causas o denuncias han sido “armadas” políticamente”.

Pregunta clave: “¿Apoyarías un posible tercer mandato del Intendente Etcheverry?”. Respuesta: Un rotundo “No”.

“Nosotros tenemos el compromiso de armar una propuesta que intente seducir al electorado lobense, no está decidido si iremos con un candidato propio o con una alianza, pero ya estamos trabajando en esa alternativa. Es posible que intentemos algún tipo de acuerdo con la UCR, pero siempre dentro del Cambiemos. Insisto, podemos llegar a un acuerdo con una lista de unidad, y si eso no ocurre, se dirimirá en las PASO. Estamos preparados para ambas cosas. No vamos a dejar que suceda lo mismo que en 2019, cuando no se permitió que la lista encabezada por Zabalo y Sandoval se presentara a elecciones. Más allá de que todavía falta para 2023, no sé cómo va a terminar esto”.

“Por eso, te reitero que cualquiera sea el escenario, estamos preparados para lo que venga. Lo que sí te digo, es que no vamos a permitir que boicoteen una lista como hicieron en 2019. Y lo vamos a resolver antes de recurrir a la Justicia Electoral, porque si esperamos que eso pase, ya no nos queda margen para montar una campaña. Las cosas cambiaron, también, porque en ese entonces, Cambiemos era oficialismo a nivel nacional y provincial, y se tomó una decisión de arriba”, sentenció. Oyarzun sabe bien que, al menos por ahora, no es conveniente «ir al choque», en el supuesto de que Etcheverry decida bajarse y delegar en alguien de su confianza la candidatura para el año que viene. Es evidente que las frustradas internas de 2019 dejaron heridas que están lejos de cicatrizar, por lo cual si el frente Cambiemos a nivel local se fractura en dos, las consecuencias podrían ser imprevisibles con miras a los próximos comicios.