El ex presidente, en persona, declaró en el juicio por las coimas en el senado. Aseguró que no existieron los supuestos sobornos.
"Hubo un conjuro de intereses y el interés político se metió en la causa", afirmó el ex mandatario luego de aclarar que el tema de los sobornos surgió con la tapa de una revista "de la forma más absurda, con un anónimo que es pura basura".
"Yo me pregunto por qué estoy aquí en este juicio", dijo al tribunal al negar la supuesta reunión con el arrepentido y coacusado Mario Pontaquarto en la Casa de Gobierno, que fue tan discutida a lo largo de la investigación. Según dijo De la Rúa, la Cámara Federal no la tomó como prueba, no fue acreditada dicha reunión.
"No salió dinero de la SIDE, las cuentas de la SIDE son impecables, no falta el dinero, pero los fiscales no quisieron ni verlo", dijo De la Rúa al acusar a la fiscalía que en su momento estaba a cargo de la investigación de "haber tomado partido". En ese sentido, criticó a los investigadores por haber fundado en los diarios las acusaciones en contra de los imputados.
Repuesto de una leve afección que lo obligó días atrás a dejar los tribunales en medio del alegato de su defensora para someterse a un chequeo, De la Rúa decidió asumir en persona el último tramo del alegato final.
Ante el tribunal, explicó que no se incrementó el patrimonio de ningún senador, "no hay motivo ni hay móvil, la fiscalía y la querella quiere probar todo por indicios para demostrar la posible culpa de los imputados y para probar el hecho que no existió", argumentó
"No se puede decir que el hecho existe porque conviene que exista, porque sale en las encuestas y la gente lo cree, no se puede decir que exista porque queda bien", explicó luego de rebatir las acusaciones basadas en las declaraciones del "arrepentido" Pontaquarto.
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