Al igual que el año pasado, familiares y amigos de Abel Rubén Barbero encabezaron ayer por la tarde una movilización a la sede de la Fiscalía, en Uriburu 750, al cumplirse el segundo aniversario de la misteriosa desaparición, en un intento por mantener vigente la búsqueda.
El nieto de Barbero, Hernán Alonso, encabezó la movida con el desconcierto ante la falta de novedades en torno al paradero de su abuelo. Esta vez recibió el apoyo de familiares de Fernando Lario, el arquitecto marplatense desaparecido el 7 de julio de 2012, en un gesto de acompañamiento por una lucha compartida.
Allí, en el acceso al edificio del Poder Judicial, las familias intercambiaron experiencias y esbozaron sus preocupaciones en torno al sistema desplegado para las averiguaciones de paradero.
Y como corolario de la actividad colocaron carteles en el frente y en el portón de ingreso al inmueble que recuerdan el caso y reactiva la búsqueda del vecino.
“Vamos a seguir peleando y buscando hasta saber qué sucedió para cerrar esta historia”, resumió Alonso.
“Un misterio”
En diálogo con El Eco de Tandil, Alonso repasó el caso y adelantó que impulsarán nuevas acciones para impulsar la investigación y evitar su estancamiento.
Informó desde que se radicó la denuncia que “no se sabe más nada”, y agregó que desde el momento en que fue visto por última vez saliendo de su departamento de Sarmiento al 500, alrededor de las 15.30, hasta que fue hallado su vehículo en San Lorenzo al 900, cerca de las 18 “hay un umbral de tiempo que es un misterio. Desconocemos qué pasó en ese lapso”.
Ratificó que la causa, que cuenta con más de mil fojas “no avanzó absolutamente nada”, y dijo que la última novedad giró en torno a la incorporación al Sistema de Ofrecimiento de Recompensas del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Provincia de Buenos Aires en el marco de la resolución ministerial 093/13, que se oficializó el 18 de febrero del año pasado.
“No hay nada concreto que nos dé un indicio sobre lo que pudo haber pasado”, remarcó, y dijo, con cierta resignación, que “estamos como en el primer día”.
“El sistema no está preparado”
A partir de su experiencia, Alonso realizó un planteo y expuso que “más de la angustia, incertidumbre y vacío que le queda a uno, hay preocupación de que esto le puede pasar a cualquiera y el sistema no está preparado”.
Es por ese motivo que la familia entabló contacto con vecinos de otras localidades que padecieron hechos similares, como el caso de Fernando Lario, en Mar del Plata. “Hay un común denominador en todos los casos. La persona desaparece, nadie sabe nada, la Justicia avanza en la investigación a la víctima y no de los entornos”, analizó.
Y advirtió que, cuando tomaron contacto con el caso del arquitecto “había siete desaparecidos en Mar del Plata y ahora hay catorce. Y es preocupante”.
Por eso Alonso explicó que su tarea también apunta a “alertar” para que “se tomen las prevenciones necesarias porque el sistema tiene que estar preparado para salir a buscar en el acto a una persona”.
Gestiones
En relación al compromiso por la búsqueda destacó “el acompañamiento del Municipio en cuanto a la contención y a la articulación con la Sub DDI”, y marcó que la difusión oportunamente asumida por la comuna fue “colocar la foto en la luneta de los patrulleros para que el personal esté al tanto”.
En esa línea también subrayó el rol de los medios de comunicación y de las redes sociales en pos de extender el alcance de la búsqueda.
Por eso, y en relación a los próximos pasos, Alonso resaltó que el objetivo es replicar ese accionar y adelantó que ya iniciaron las gestiones ante la Provincia la posibilidad de incrementar el monto de la recompensa.
En efecto, indicó que mantuvieron un encuentro en La Plata con el director de Personas Perdidas, dependiente del Ministerio de Justicia, a quien le entregaron datos de la causa y ahora esperan novedades.
“Y siempre trabajando en la difusión. Tratando que si alguien, por alguna razón u otra no se anima, que se acerque a la Fiscalía o a la DDI. Queremos saber qué pasó”, concluyó Alonso.
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