“Hoy recordamos aquel 1° de julio de 2000, cuando en un contexto de absoluta soledad, desde el Estado municipal y de la mano de organizaciones de Derechos Humanos de la zona oeste, decidimos recuperar y abrir las puertas de este primer espacio de la memoria en América Latina, en el que nos propusimos consagrar la vida sobre la muerte, construir el futuro a partir de la Memoria, la Verdad y la Justicia, y recordar a aquellos que lucharon y fueron perseguidos trayendo al presente sus sueños y sus utopías”, sostuvo Martín Sabbatella -ex intendente y fundador de la la Casa de la Memoria-.

“Haber recuperado este espacio para el ejercicio de la memoria es reconfortante, sobre todo porque lo hicimos junto a la comunidad, se pobló de vecinos, de vecinas, de trabajadores, de estudiantes, de artistas, de intelectuales que vinieron a conmoverse con el horror pero también a resignificar juntos este espacio”, destacó Lucas Ghi.

“Es un orgullo este espacio que hemos construido como política pública del Estado Municipal, un espacio que en la Dictadura estaba vinculado a la muerte, a la tortura, al horror; fue en la década 90 expresión de la corrupción y la frivolidad menemista y hoy es un espacio para el ejercicio de la memoria colectiva, la reflexión, el debate, para exigir juicio y castigo a los responsables del genocidio y  que en el marco de estos últimos 12 años también se ha incorporado como política del Estado Nacional”, manifestó Hernán Sabbatella.

Durante el acto se le hizo entrega a una ex trabajadora municipal, que había sido detenida y desafectada durante la Dictadura bajo la acusación de realizar “actividades subversivas”, de un decreto reparatorio que modifica el motivo de su separación del cargo por “persecución política”. 

La actividad contó con la presencia de la senadora provincial por Nuevo Encuentro Mónica Macha, el director de la Biblioteca Nacional Horacio González, organismos de Derechos Humanos, vecinos y vecinas y la participación artística de la cantante  Liliana Herrero, Raul Rizzo, Gabriela Radice, Diego Reinhold y Lidia Catalano.