“Ya pasó un año de gestión y hasta la fecha no conocemos cuáles son las políticas nacionales para las industrias. Esto nos preocupa mucho”, detalló el dirigente empresario que teme un regreso a las políticas de los 90.

Con estas declaraciones el empresario respondió al ministro nacional que durante una entrevista con medios nacionales publicada esta semana determinó que “para bajar la inflación vamos a importar más”.

A su vez acusó a los funcionarios del gobierno nacional “de ser insensibles” y de actuar “sin importarles los daños colaterales que generan las medidas que se toman para llegar a objetivos como bajar la inflación”.

Si bien reconoció que “la apertura de las importaciones puede reducir la inflación” señaló que existen “otros caminos para llegar al mismo objetivo sin afectar a la industria local pero para ello se necesitan acuerdos”.

“Además la inflación no se baja de un día para el otro con medidas espectaculares. Para bajar la inflación se necesita trabajar duramente pero conteniendo a todos los sectores”, dijo el dirigente.

El industricidio

Agregó que el gobierno nacional hasta ahora no demostró tener políticas concretas en varios campos y todo indica que “el país marcha nuevamente a un industricidio, es decir un país sin industrias”.

Para el dirigente es inconcebible vivir en un país donde los productos que se vendan sean importados. Y para él todo indicaría que las ideas del gobierno nacional van en ese sentido, más allá de implique un regreso a la década del 90.

Irigoyen planteó la necesidad de que el gobierno exteriorice cuanto antes cuál es su proyecto y en el caso de que efectivamente resolvieron no proteger a determinados sectores de la economía nacional se informe claramente para que el empresariado tome medidas.

Añadió que “el empresario argentino tiene una gran capacidad para adaptarse a las circunstancias pero para poder adecuarse necesita contar con información sobre las medidas que se tomarán”.

Blanqueo laboral

Por otra parte, apoyó la posibilidad de que se concrete este año un gran blanqueo laboral que termine con los empleos informales que hoy llegan a niveles impensados para un país como Argentina.

“Así como hubo un blanqueo fiscal es necesario trabajar con todos los sectores para lograr que se pueda avanzar con un sistema que permita registrar a la gran masa de empleados que hoy están afuera”, comentó.

Bajas expectativas

El dirigente graficó que las expectativas son muy importantes para un país como Argentina y según él pese a que “ya pasó un año no hay confianza, lo que a su vez genera que cada sector especule”.

“Se creyó que con el cambio de gobierno iban a llegar las inversiones pero pasó un año y las inversiones no llegaron. Se necesita más confianza pero esta no se impone sino que se construye”, detalló.

Amplió asegurando que “se necesita que el gobierno nacional ponga en marcha un plan serio y se logre un gran acuerdo con todos los sectores”.