Los senadores nacionales por Salta estuvieron con empresarios, transportistas e industriales. Piden que se retomen las obras.
En la reunión se analizó tramo por tramo el estado actual de la ruta y de allí surgió la decisión de gestionar la finalización de los proyectos de obras pendientes, la adjudicación del tramo licitado y el llamado a licitación de aquellos en donde está concluido el proyecto de obra.
José Gauffin, titular del Copaipa, inició el encuentro agradeciendo la presencia de los legisladores y, tras detallar la situación actual de la comunicación vial de Salta con Chile, se escuchó de parte de Facundo Huidobro, presidente de la Cámara de Minería, la situación particularmente complicada que viven las empresas mineras que operan en la zona de San Antonio de los Cobres y en los lugares cercanos.
El ex gobernador Romero expresó la necesidad de trabajar juntos tanto con las autoridades chilenas como con las argentinas para lograr que en ambos Estados se comprenda que la integración por esta vía es esencial. “Llevamos el gas, gastamos más de 50 millones de dólares en puentes con recursos provinciales, construimos un puesto de control integrado que ahora será ampliado, pero la ruta no ha avanzado”, recordó.
Romero agregó que en aquella época se había alcanzado un acuerdo por un crédito del BID de mil millones, que iba a ser destinado en un 50% a la línea energética de 500 kv, y el otro 50% a corredores viales como el de la ruta 51, pero la obra de energía eléctrica insumió la totalidad del crédito y las provincias no han recibido ninguna compensación de la Nación luego de los cambios.
“La integración siempre debe ser una prioridad”, expresó Romero al finalizar el encuentro. A su turno Sonia Escudero manifestó su voluntad de coordinar encuentros con sus pares chilenos, y expresó que “de mis charlas con ellos surge que existe por parte de las autoridades chilenas plena voluntad de avanzar con la integración física con Salta, y es nuestra obligación canalizar esas intenciones en obras concretas que serán fundamentales para el desarrollo de los habitantes de la Puna y para el crecimiento productivo de la zona”.
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