Ambientalistas presentaron una apelación al fallo que le permite a la termoeléctrica Araucaria volver a funcionar.

La semana pasada el Juzgado Federal de Zárate - Campana habilitó la puesta en marcha de la planta, con el objeto de que inyecte energía al sistema nacional.

El Juez Adrián González Charvay le dio el visto bueno a la empresa, luego de que esta presentara dos estudios de impacto ambiental.

La autorización solo le permite a Araucaria prender 2 de sus turbinas, y durará hasta junio de este año.

Sin embargo, ambientalistas reclamaron que se dé marcha atrás con esa decisión con carácter suspensivo, es decir que hasta se trate el reclamo la empresa no active los motores.

Agrupaciones ambientalistas patrocinadas por el abogado Fabián Maggi expusieron en la apelación que los estudios de impacto ambiental fueron dos, ambos a cargo de la empresa, cuando ellos habían pedido que lo haga una universidad pública.

Además, insistieron en que la firma aún carece de otros permisos para funcionar, como los que otorga la propia Comuna, el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS), y la Autoridad del Agua (ADA).

“En base a la ausencia de habilitaciones ambientales como son los permisos pertinentes de la Autoridad del Agua y la ausencia de habilitación municipal, la falta de ejecución de las obras de insonorización comprometidas que evidencian un escenario de riesgo ambiental no evaluado e inadmisible, solicitamos se conceda el recurso interpuesto con efecto suspensivo”, dice el escrito al que tuvo acceso Pilar de Todos.

Las organizaciones manifestaron que la decisión de Charvay “luce desprovista de todo apoyo legal, fundada tan solo en la voluntad del magistrado que omite aplicar los principios del derecho ambiental y además prescinde de la normativa específica que regula la actividad industrial (…)”.

Además, ante el argumento de que es necesario encender la planta por la falta de energía, los ambientalistas indicaron que “otro elemento de conocimiento público que revela la falsedad de la alegada existencia de una mayor demanda energética es el verificado por todos los ciudadanos que sabemos que no hubo en el último tiempo cortes de energía y que además los pocos que se producen suceden por fallas en el sistema de distribución y no por deficiencias en la generación”.