Por: Raúl Bazán.

¿Te ha pasado que, cuando tomas una gaseosa en botella de vidrio, sientes un sabor más rico y refrescante que en un recipiente de plástico? Pues debes saber que muchos piensan lo mismo, de hecho, es común que algunas personas tomen esta bebida en este tipo de envase, así sea retornable, después de jugar una ‘pichanga’, realizar trabajos pesados como construcción, o cualquier tipo de actividad agotadora bajo el calor del sol.

Aunque no lo creas, el motivo de este fenómeno no se basa solo en el paladar o percepción de cada individuo, sino que existe una explicación científica. Para conocerla, La República contactó al químico Luis Espinoza, de la Universidad Cayetano Heredia

¿Por qué la gaseosa en botella de vidrio sabe mejor?

Espinoza menciona que el sabor de un alimento puede cambiar por dos razones. El primero es porque le falta un ingrediente y el segundo debido a que se contaminó con otro compuesto. En el caso de la gaseosa en botella de vidrio o de plástico, se pueden presentar ambos escenarios.

Respecto al primer caso, el químico señaló que el sabor de una gaseosa se debe principalmente a su efervescencia y citó un artículo de Reader’s Digest que indica lo siguiente: “El dióxido de carbono es un gas inocuo que producimos todos los seres humanos al respirar. En la gaseosa actúa como conservante, intensifica el sabor, el aroma, aporta acidez y da efervescencia a la bebida”.

En este contexto, el especialista menciona que el plástico no es un material impermeable, por lo que permite el intercambio de gases, vapores y/o reacciones. Todo depende del polímero que se usó en su elaboración. Esto hace que las moléculas se filtren en mayor cantidad que en un envase de vidrio, el cual también pierde componentes con el tiempo, pero en menor medida.

Una de las moléculas que deja escapar el plástico es el CO₂, componente clave para lograr la efervescencia, ocasionando que se pierda parte del sabor de la gaseosa.

“Una razón del porqué el sabor de la gaseosa es mejor en vidrio que en plástico se debe a la permeabilidad del envase. El plástico es más permeable que el vidrio, por lo que deja filtrar con mayor facilidad las moléculas de la gaseosa”, concluye el químico Espinoza.

Respecto al segundo caso, Luis Espinoza menciona que las botellas de plástico pueden tener acetaldehído [CH3CHO], que es un un compuesto químico orgánico que a temperatura ambiente adquiere un fuerte olor afrutado. Dicho componente puede difundirse hacia el contenido del envase, en este caso, la gaseosa, modificando su aroma y por ende su sabor.

Para explicar este segundo fenómeno, el especialista citó un estudio científico de la Universidad Veracruzana, donde se explica por qué el olor de un alimento influye mucho en su sabor: “El sabor es la sensación que producen los alimentos u otras sustancias en el gusto. Dicha impresión a los componentes químicos de los alimentos está determinada en un 80% por el olfato y el 20% restante por el paladar y la lengua.”.