A tono con los cortocircuitos entre el Gobierno nacional y la Provincia, el intendente de San Miguel de Tucumán insiste en su reclamo por aumentar los recursos coparticipables. En la antesala de un año electoral, Germán Alfaro, respondió a las críticas del vicepresidente primero de la Legislatura, el alperovichista Guillermo Gassenbauer, y supeditó la mora por el pago de los aportes sociales de los empleados municipales a que la Provincia reconozca $ 85 millones de Coparticipación nacional que la Intendencia exige.

“En la medida en que no nos den los $ 85 millones que a nosotros, por los vecinos de la Capital, nos corresponden por el adelanto de la devolución de la coparticipación nacional, por supuesto que tendremos inconvenientes (con nuestras obligaciones). Hace dos meses que venimos reclamando por estos fondos, son los dos meses que tenemos mora con el subsidio”, se justificó el jefe municipal. 

Tras un acto en la Municipalidad donde el intendente ironizó sobre los destinos de los $ 54.600 millones previstos para el presupuesto 2017 si aún no habían sido reparados los puentes caídos en la inundación del año pasado, llegó el contrataque de Casa de Gobierno. El legislador Gassenbauer había tomado la posta: “es sorprendente que el intendente no esté ocupado en su gestión y en revisar por qué hace más de dos meses no realiza los aportes en concepto de obra social de sus trabajadores municipales”.

Consultado sobre estos dichos por LA GACETA, Alfaro apuntó contra el núcleo familiar del hijo del ex ministro de Gobierno, Justicia y Seguridad durante la gobernación de José Alperovich, Jorge Gassenbauer. “Mirá, por ahí también escuché que Gassenbauer se quejaba de beneficios (del gobierno nacional para con la Capital)... no quisiera ahondar en la crítica ni detenerme en el legislador, pero sis e trata de beneficios creo que la familia Gassenbauer fue una de las más beneficias durante el régimen alperovichista, pero no quiero ahondar más”, cerró.