Los inconvenientes por la falta de naftas derivó en una peligrosa costumbre de los consumidores.
Las autoridades de dicha entidad indicaron que vienen observando "una nueva práctica instalada en los consumidores de combustible líquido al por menor, consistente en almacenar combustible en recipientes y/o bidones con el objeto de sortear los escollos que implica la carga de combustible ante los faltantes habituales en las estaciones de servicio".
Con la firma de su presidenta Mónica Killian y del gerente, Christian Santiago, la Cámara de Expendedores de Combustible local alertó "sobre los graves riesgos que esa práctica acarrea, ante el alto grado de inflamabilidad de los combustibles líquidos y los gases que del mismo se desprenden".
"Asimismo informamos que para el caso que sea necesario el traslado de combustible, se deben utilizar los envases que cumplan con las normas de seguridad a tal fin", puntualiza finalmente el comunicado.
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