Alberto Fernández avala a Máximo Kirchner, pero la pelea por el PJ bonaerense sigue caliente

Alberto Fernández avala a Máximo Kirchner, pero la pelea por el PJ bonaerense sigue caliente

El intendente Fernando Gray resiste en la cúpula partidaria junto a un grupo de consejeros, pese a la fuerte presión para una renuncia masiva.

Alberto Fernández, Máximo Kirchner y una veintena de intendentes peronistas buscaron clausurar la polémica alrededor de la idea para que el jefe del bloque del Frente de Todos se convierta en presidente del PJ bonaerense. El mandatario, en tanto, se quedaría con la titularidad del partido a nivel nacional.

El jefe de Estado, los jefes comunales, Kirchner y Sergio Massa coincidieron el miércoles en José C. Paz para buscar una foto de unidad. Sin embargo, algunos alcaldes del peronismo bonaerense se resisten, prometen dar pelea y argumentan que hubo muchas ausencias. "Fueron 20 intendentes y somos 70", dice uno de ellos. 

En La Cámpora no dudan: señalan al intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, quien intercala la presidencia del partido con el titular Gustavo Menéndez, de Merlo. Ambos tienen mandato hasta diciembre de 2021, pero la organización que lidera el hijo de Néstor y Cristina Kirchner quiere ocupar ese espacio ahora, de cara al año electoral.

Entre las autoridades del PJ bonaerense aseguran que Gray no está solo. Incluyen en ese lote a Menéndez y Juan Zabaleta, de Hurlingham. Ambos, a diferencia del primero, estuvieron en el distrito de Mario Ishii.

Cerca de Zabaleta señalan que el intendente -principal armador del Presidente en el Conurbano- es verticalista y responde al mandatario, que ya terció en favor de La Cámpora. Sí piensa sostener su candidatura para dirigir la Federación Argentina de Municipios (FAM). La organización kirchnerista, en cambio, postula al intendente de La Matanza Fernando Espinoza, que tampoco fue parte de la foto.

“Tenemos nuestras convicciones, nuestras ideas. La historia del `Vamos por todo` ya sabemos cómo termina. Nadie nunca les dijo que no”, se quejan las autoridades del partido que responden a Gray, que ahora es vice y este año debería retomar la presidencia del partido hasta diciembre.

Señalan que el intendente de Esteban Echeverría es el portavoz de un reclamo que Alberto Descalzo (Ituzaingó), Menéndez y Zabaleta comparten pero disimulan. Algunos de esos alcaldes niegan esa interpretación en privado. Otros prefieren el silencio.

La idea de la postulación de Kirchner a la presidencia del partido fue de Martín Insaurralde, de Lomas de Zamora. El alcalde no estuvo en José C. Paz. Algunos intendentes se resintieron con él, porque no los consultó. “En el Conurbano no tenemos jefes, somos pares”, dicen.

En las últimas horas, Mariano Cascallares, de Almirante Brown, se sumó al operativo clamor para que Kirchner conduzca el peronismo bonaerense. Otros alcaldes, que toman distancia de La Cámpora, lo justifican. “Si se toma licencia, le toman el distrito”. Señalan al viceministro del Interior y mano derecha de Wado de Pedro, José Lepere, quien es concejal y está de licencia. “Por eso no agarró un cargo nacional”, señaló otro dirigente bonaerense.

Los defensores de Gray defienden que es un hombre del partido, el mismo que el kirchnerismo despreció en 2017 para forjar Unidad Ciudadana. Aseguran que el intendente de Esteban Echeverría no teme represalias de la gobernación bonaerense o la Casa Rosada. “Ya tuvo en contra a (Mauricio) Macri y a (María Eugenia) Vidal, que le cortó todo y le quisieron inventar causas”, recuerdan en su círculo íntimo.

En el PJ provincial insisten en que los consejeros no avalarán la nominación de Máximo Kirchner ni renunciarán para ceder sus vacantes. Los intendentes que responden al Presidente señalan que las formas administrativas son formalidades. Algunos miembros de la conducción partidaria amenazan con ir a la Justicia e impugnar el desembarco de Kirchner en el partido, lo que representaría una nueva intervención del partido.

Quienes defienden a Gray destacan su extracción kirchnerista, como funcionario de Alicia Kirchner en el ministerio de Desarrollo Social. Señalan que solo el ex intendente de La Matanza y ex vicegobernador bonaerense Alberto Balestrini se animó a pelearse a los gritos con Néstor y Cristina Kirchner, cuando quisieron imponer en la lista de su distrito a Jorge Ceballos, de Barrios de Pie.

El cargo al que aspira Kirchner, aunque en La Cámpora afirman que solo aceptará si hay consenso total, permite controlar la junta electoral, que define las listas. También lo habilitaría a intervenir las filiales municipales del PJ. “No hay posibilidad de que los consejeros y los congresales acepten la posibilidad de una renuncia masiva”, señalan en un par de distritos bonaerenses. Explican el variopinto mundo que allí convive: desde el duhaldismo residual, al peronismo ortodoxo.

Ante la improbable pero no descartada del todo posibilidad de que no haya PASO en 2021, el presidente del partido tendría un rol fundamental para armar las listas de candidatos.

Massa, que estuvo presente en José C. Paz, se mantiene prescindente. En su entorno explican que es el líder del Frente Renovador, con el que pretende disputar el electorado de centro y de clase media a Horacio Rodríguez Larreta, a Roberto Lavagna y de algunos gobernadores. Sin embargo, el presidente de la Cámara Baja se entiende con Kirchner. 

Cerca del Presidente descuentan que la situación se ordenará y que el jefe del bloque de diputados oficialistas se hará con la presidencia del PJ bonaerense. “Ganamos tiempo que ayuda a distender”, explicaron en uno de los despachos más importantes de la Rosada.

Gray, por su lado, hizo circular un video por el año nuevo con un mensaje para la interna bonaerense. "Vienen tiempos de diálogo, de apertura, de consensos, y no de imposiciones, de respeto a las instituciones democráticas en la pluralidad y la diversidad", sostuvo sin que fuera necesario aclarar a quiénes se refería. 

En La Cámpora, en tanto, aseguran que acompañan el pedido de los intendentes para eliminar las limitaciones a las reelecciones indefinidas, que ponen en jaque la continuidad de casi todos los intendentes peronistas del Gran Buenos Aires. Paradójicamente, la organización kirchnerista alista al mismo tiempo candidatos propios en todos los distritos. Los jefes comunales apuestan a un fallo judicial o a un acuerdo con los intendentes de Juntos por el Cambio en el Senado bonaerense.

 

Guido Carelli Lynch

Comentá la nota