El titular de Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Agustín Rossi, sobre la situación actual de Brasil tras el fallido intento de golpe de Estado, la relación con Argentina y la repercusión del atentado a Cristina Kirchner el pasado 1 de septiembre frente a su departamento en la ciudad de Buenos Aires por parte de un grupo de ultraderecha.

En diálogo con El Destape Sin Fin, el "Chivo" señaló que existe "un crecimiento de grupos de derechas empiezan a tener una mayor relevancia y terminan imponiendo su posición frente a los partidos políticos”. "Cuando la derecha pierde elecciones intenta imponer sus condiciones por otros métodos", agregó, en relación al asalto a los tres poderes ocurrido el pasado domingo en Brasilia por parte de fanáticos del ex presidente Jair Bolsonaro. 

Rossi advirtió que hay "un crecimiento en la región de los grupos de derecha y dentro de esos espacios de derecha las posiciones más intransigentes empiezan a tener mayor relevancia". El funcionario nacional analizó el rol de las redes sociales en la difusión de mensajes de odio, como así también "la creación de sentido que generan el partido judicial por un lado y los medios de comunicación por el otro viralizan" esos "discursos de odio" y puede "desencadenar lo que sucedió en Brasil", que culminó con el Congreso Nacional, el Palacio de Planalto y la sede del Tribunal Superior Federal (TSF) completamente destrozados por la turba de militantes bolsonaristas. Hasta el momento había 1500 detenidos. 

Asimismo, el jefe de los espías recordó lo que pasó en Argentina hace ya tres meses, cuando un grupo denominado "Los Copitos" organizó el atentado fallido contra la vicepresidenta Cristina Kirchner. Por el momento hay 3 detenidos, entre ellos Fernando Sabag Montiel, el sicario que gatilló en la cabeza de CFK pero que por un desperfecto técnico no disparó el arma de fuego. Aun hoy se investigan las vinculaciones políticas y financieras de este sospechoso grupo, adherente a ideas de ultraderecha. 

Al respecto, Rossi fue contundente en relación a las repercusiones del hecho, minimizado por un sector de la oposición: "A veces pienso que el atentado contra Cristina tuvo más impacto en el mundo que en la Argentina".

Fuerte respaldo a Lula de los tres poderes tras el intento de golpe

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, recibió el último lunes el apoyo de los 27 gobernadores y del Distrito Federal de Brasilia, además de los ejecutivos locales y ministros de la Corte Suprema en un encuentro esta tarde, pasadas las primeras 24 horas del ataque de golpistas que responden a Jair Bolsonaro. "Ellos quieren un golpe y no lo van a tener", dijo Lula con firmeza en un discurso luego de que hablaran varios de los gobernadores y se solidarizaran con el Ejecutivo nacional. 

La de esta tarde fue la última de varias reuniones que el mandatario del Partido de los Trabajadores tuvo con distintos cuadros políticos después del crítico domingo. Luego de estar reunidos por más de una hora en Brasilia, Lula dijo que van a investigar en profundidad quien financió a los bolsonaristas que tomaron la sede de los tres poderes nacionales y argumentó que es imposible que estas fuerzas hayan instalado campamentos durante dos meses sin tener ningún tipo de ayuda externa. "No es posible que este movimiento dure lo que duró en la puerta de los cuarteles sin financiamiento", denunció el Presidente. 

Atentado a CFK: el presunto rol de Milman y falta de repudio

En contraste, la oposición se mostró dividida ante el intento de magnicidio contra la ex presidenta, entre aquellos que expresaron su repudio ante el hecho, quienes evitaron hacerlo (como Patricia Bullrich) o quienes aprovechar el hecho para criticar al gobierno nacional. 

Hay varios indicios que vinculan a la banda de Los Copitos con sectores de la oposición, especialmente grupos libertarios y halcones del PRO. El principal es la serie de transferencias de más de 7 millones de pesos de fideicomisos de Caputo Hermanos a Jonthan Morel, líder de Revolución Federal. También, que los abogados del jefe de los copitos, Gabriel Carrizo, están relacionados al PRO y hayan sido asesores de legisladores opositores en el Congreso de la Nación. Y Fernando Sabag Montiel pidió que un militante de derecha, Hernán Carrol, que está vinculado a Patricia Bullrich y un ex espía macrista, le pague un nuevo abogado privado.

El último y por el cual CFK pide que se investigue en profundidad es la llamada "pista Milman", basada en los dichos del diputado y mano derecha de Patricia Bullrich en una reunión, en la cual el legislador habría expresado que "cuando la maten, voy a estar en la Costa". Esto ocurrió antes del atentado. Curiosamente, Milman había presentado en los días previos un proyecto de ley en cuyos considerandos mencionaba sugestivamente la "posibilidad" de que la vicepresidenta lleve adelante un "falso atentado" para victimizarse ante la opinión pública.