En la cuenta regresiva hacia las primarias del próximo domingo, en Carmen de Patagones (Sexta Sección electoral) todas las fichas se mueven para respaldar la candidatura presidencial del gobernador Daniel Scioli, pero sectores del justicialismo local trabajan territorialmente con intereses distintos en función de las pre-candidaturas provinciales de Julián Domínguez y Aníbal Fernández.
El oficialismo encarnado en el actual intendente Ricardo Curetti va por el quinto período de gobierno consecutivo, pero sus preferencias a escala provincial están volcadas a favor de la candidatura del diputado nacional Julián Domínguez, mientras distintos sectores de la militancia lugareña que respaldan al sciolismo desde la primera hora pujan por impulsar la figura de Aníbal Fernández.
El respaldo a esta altura explícito para el Jefe de Gabinete nacional se da, analizan distintos observadores políticos locales, en función de “compensar la balanza de poder” de la ciudad, que tiene como rasgo característico una rencilla de pago chico protagonizada por el alcalde y su antecesor y rival político interno, Haroldo Amado Lebed, hoy a cargo de la Subsecretaría de Gestión de la cartera conducida por el oriundo de Quilmes.
El respaldo para Aníbal tiene eje en la agrupación “La Juan Domingo”, que desde hace tres años cimienta el proyecto presidencial sciolista en Patagones. Tiene como referentes principales al ex concejal Alfredo Cabeza, Juan Batista, Marcelo Honcharuk, Roxana Terruel, Carmen Amigo, Gonzalo Ponce y Alejandro Villemur, entre otros.
“Pensamos que el gobernador de la provincia de Buenos Aires tiene que ser Aníbal Fernández; ha demostrado capacidad de gestión y conoce a los bonaerenses como nadie”, manifestó un integrante de la mesa “anibalista” en diálogo con NOVA, que lamenta que desde el Ejecutivo “intenten ignorar” la imagen y la boletas del precandidato a gobernador y ex senador nacional. Las calles de Patagones reflejan las diferencias en los alineamientos detrás de Fernández y Domínguez, pero el respaldo al ex motonauta “está garantizado”.
El intendente Curetti terminó de volcarse al proyecto sciolista luego de que el ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo se bajara de la pelea presidencial, designación de Carlos Zannini como pre-candidato a vicepresidente mediante. “No le quedó otra opción que empezar a pegar su imagen a la de Daniel, pero ahora evita a Aníbal por su disputa y enemistad con Lebed”, resumen.
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