OSSE le propondrá a la Justicia mezclar el agua para reducir los niveles de arsénico.
A casi una semana de que comenzó el conflicto por el agua contaminada con arsénico en San Roque, departamento de Jáchal, los vecinos siguen preocupados porque no saben cuándo les darán una solución definitiva, aunque la Municipalidad les está llevando agua en camiones. Ahora, Jorge Barifusa y el presidente de OSSE, Cristian Andino, dijeron que pedirán autorización a la Justicia para llevar a cabo una solución provisoria hasta que definan qué hacer. Propondrán mezclar los 60.000 litros de agua que hay en los piletones del pueblo y que tienen alto nivel de arsénico, con 20.000 litros de agua potable que llevarán desde Jáchal. Lo que buscan con esto es reducir la cantidad de arsénico a 0,04mg/litro, lo permitido por el Código Alimentario Argentino, que son de 0,05mg/litro. Los piletones tienen capacidad para 80.000 litros.
Todo esto sucedió luego de que el miércoles pasado el juez Pablo Oritja, al frente del Juzgado Letrado de Jáchal, ordenara restringir el servicio de agua para todo el poblado de San Roque, porque el agua tenía más arsénico de lo permitido. Fue tras la presentación de un recurso de amparo de Angélica Quinteros, vecina del pueblo y quien hizo analizar en Buenos Aires el agua que salía por la canilla. Esto encendió la alarma en todos los pobladores. Ante esto, Salud Pública salió a poner paños fríos y dijo que no habían detectado enfermos por el agua.
Mientras tanto, Oritja ordenó al Municipio y a OSSE, abastecer con agua potable a las 155 familias de San Roque. Pero la gente estuvo varios días sin agua de red, porque estaba cortada por orden judicial y el agua que les llevaba la comuna no era suficiente. Fue cuando decidieron tomar agua de los canales y la que les donaban. Ahora, la situación no cambió totalmente. Si bien, volvió a restituirse el servicio domiciliario, el agua de los surtidores no es apta para el consumo humano. Mientras tanto, la comuna lleva camiones de agua potable a los pobladores, pero estos, por recomendación de Salud Pública, tienen que hervirla por temor a que contenga bacterias producidas por el modo de traslado.
Es para evitar todos estos inconvenientes que OSSE y el Municipio realizarán una presentación judicial hoy para pedir que se autorice la mezcla del agua. La idea es que a los piletones que hoy poseen unos 60.000 litros de agua que salen del pozo que tiene alto contenido de arsénico, se agregue unos 20.000 litros de agua extraída de San José de Jáchal y que es apta para el consumo humano. Esto, para que la gente vuelva a utilizar el agua que sale por los surtidores y no tenga que seguir llenando bidones o tomar agua del canal.
Desde la Municipalidad dijeron que hasta ayer estaban llevando 2 camiones diarios de agua con 10.000 litros cada uno, destinado para el consumo humano, porque para higiene se está usando el agua con arsénico, ya que el juez levantó la restricción del servicio el jueves pasado.
Ante la idea de la mezcla del agua, el juez Ortija, dijo que ve con buenos ojos este planteo, ya que según su fallo, la Municipalidad debía proveer agua a los vecinos ‘en bidones u otros mecanismos’. ‘No importa cómo lo hagan siempre y cuando el agua sea apta para el consumo’, dijo el magistrado.
Andino, dijo que esta iniciativa será hasta que encuentren una solución definitiva. Ahora empezarán a hacer los estudios para hacer un acueducto que llevará el agua desde una toma ubicada junto al Automóvil Club Argentino, a 7 km de San Roque. ’Ahí tenemos la cañería grande que nos permitirá no dejar a otra gente sin agua’, dijo el funcionario, que explicó que de efectivizarse esa obra deberán pedir financiamiento a la Provincia.
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