Un corrillo pondría en riesgo una obra de cloacas que beneficiaría al 70% de Alderetes y Banda del Río Salí. Los intendentes de esas ciudades del este tucumano plantearon su preocupación ante la divulgación extraoficial de que las obras de saneamiento dejarían de financiarse en un 100% con fondos nacionales (a través de un préstamo al Banco Interamericano de Desarrollo, BID), para que se realicen con fondos compartidos: un 70% con recursos de Nación y un 30% con dinero de las arcas provinciales.

“Nos preocupa mucho, por eso es que mañana a la tarde (por hoy), nos reuniremos con las autoridades del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enhosa) para pedirles por escrito que liciten de una vez las obras”, adelantó a LA GACETA Darío Monteros, jefe municipal de Banda del Río Salí. El reclamo mantiene en vilo a más de 90.000 tucumanos que aún no tienen cloacas.

“Me extraña que salgan así, esto es producto del juego perverso de polemizar con la Nación para sacar un rédito político de algo encaminado. No veo por qué tanto escándalo, hay que cumplimentar pasos. Tenemos que acostumbrarnos a que hay reglas claras que hay que cumplir”, rechazó los planteos Alejandro Ávila Gallovicepresidente del Enhosa, respecto a las obras, presupuestadas en $1.100 millones.

Tardanza en licitar

“El último contacto que hemos tenido con autoridades nacionales fue una visita a comienzos de año para constatar las bases del proyecto. Recorrieron los terrenos que dispusieron los dos municipios para las estaciones de bombeo y el solar expropiado por la Provincia donde se emplazará la planta de tratamiento, en San Andrés. Desde entonces que esperamos la decisión política de Nación de llamar a licitación a esta obra trascendental para las dos ciudades”, planteó Sergio Venegas, intendente de Alderetes.

Las obras para la construcción de la red cloacal de Alderetes y Banda del Río Salí forma parte de un proyecto macro: el cordón sanitario del Gran San Miguel de Tucumán (incluye a Las Talitas, Tafí Viejo, Villa Carmela, Alderetes y Banda del Río Salí). Hace nueve años se iniciaba la primera etapa, que incluía a Tafí Viejo, Villa Carmela y Las Talitas. El proyecto buscaba revertir la falta de servicios tras la creación de la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT): en 2004 la mitad de la población provincial no tenía cloacas -según declaraciones vertidas en ese momento por el entonces gerente Alfredo Calvo-.

“De pronto, las fuentes de financiamiento contempladas fueron variando. De hablar de un proyecto con recursos nacionales, se habló de Participación Público Privada y también tuvimos comentarios de autoridades nacionales de que se propondría que una parte del proyecto sea financiado con recursos provinciales. No tenemos precisiones”, continuó Venegas. Y agregó: “nuestro municipio no está en condiciones de financiar el 30% de la obra. De todas maneras espero que el Presidente cumpla su palabra cuando anunciaron hace dos años que la obra se financiaría con el BID”. “Constantemente nos fueron pidiendo más requisitos, cuando en teoría en enero de 2017 estaban toda la documentación cumplimentada. José Cano, cuando era titular del Plan Belgrano, había anunciado en 2016 que ya se licitaba. Sentimos que nos siguen corriendo el arco. No sabemos qué nos pueden pedir”, criticó Monteros.

Ávila Gallo descartó los rumores: “el financiamiento es completamente a través de Nación, vía préstamo del BID. En esta obra en particular tengo entendido que no se financiará de forma compartida. Se financiaban algunas obras con esfuerzo compartido, donde Nación financia el 67% de los trabajos y las provincias el 33%, pero en este caso se financia el 100% con el BID. No entiendo de dónde surge la confusión; falta cumplir con los requisitos”.