En el marco de un encuentro por la libertad de expresión, representantes de entidades de medios gráficos, televisivos, radiales y digitales expresaron su repudio por los bloqueos que impidieron la circulación de Clarín y afectaron la distribución de La Nación del domingo pasado. En una conferencia de prensa, también exhortaron al Gobierno nacional a tomar las medidas para evitar que se repitan este tipo de hechos.

“Entendemos que la libertad de expresión ha sufrido uno de los mayores atropellos del que se tenga registro en un período democrático”, expresa la declaración que firmaron todos los presentes. “Impedir la circulación de un diario es un delito penal que afecta una libertad esencial para nuestra Constitución, el régimen republicanos y el sistema democrático”, puntualizaron.

Pablo Casey –representante de la Asociación de Editores de Buenos Aires (AEDBA)– observó que “desde 2008, cuando empezó la metodología de bloqueo a las publicaciones, tanto desde AEDBA como desde la Comisión Empresaria de Medios de Comunicación Independientes (CEMCI) se expresó la preocupación por esta clase de medidas de acción directa que lesionan derechos constitucionales básicos de los editores y la ciudadanía”. En la mesa también estaban Sebastián Etchevehere (Asociación de Editores Digitales Argentinos, AEDIA), Alberto Veiga (Asociación de Radiodifusoras Privadas Argentinas-ARPA), Daniel Ripoll (Asociación Argentina de Editores de Revistas-AAER); Daniel Dessein (ADEPA); Walter Burzaco (Asociación Argentina de Televisión por Cable-ATVC); Sebastián Zuelgaray (Asociación de Diarios del Interior de la República Argentina-ADIRA) y Carlos Molinero (Asociación de Teleradiodifusoras Argentinas -ATA).

Dessei resaltó que “se han quebrado normas penales, principios constitucionales, principios republicanos, se han desobedecido órdenes judiciales”.

Casey valoró las solicitadas y los respaldos de distintos sectores sociales a la libertad de expresión, en el mismo sentido que la declaración del Senado de la Nación que repudió “ la metodología del bloqueo como método de protesta”.

“Que las autoridades tomen las medidas necesarias para que nunca más se repitan este tipo de atentados contra la libre circulación de los medios”, añadió.

“No solo se afecta la libertad de expresión a través de los bloqueos, sino también con la iniciativa por parte del Gobierno de interferir en aspectos claves de la independencia y sustentabilidad de los medios de comunicación. El riesgo de la subsistencia de los medios con restricciones indirectas también constituye un obstáculo para el ejercicio adecuado de la libertdad de prensa”, especificó Casey. A través de la publicidad oficial, el Gobierno destina cuantiosos recursos a los medios adictos.