Silvina Liz Díaz (32), la mujer que el miércoles por la tarde efectuó disparos contra la policía en Pico, intentó suicidarse en la Comisaría Tercera, previo a la audiencia judicial.
La audiencia judicial tramitada como flagrancia estaba pautada para las 11 de la mañana, pero se retrasó por más de una hora porque la mujer debió ser trasladada al Hospital Centeno, luego que intentara ahorcarse con su pantalón.
La fiscal Ivana Hernández relató el hecho ocurrido ayer alrededor de las 19:30 horas en inmediaciones de calles 35 y 2, con características que luego la mujer detenida trató de modificar. Según Hernández el arma que utilizó la acusada, un pistola semiautomática Versa calibre 22 cargado, la extrajo de las ropas de su pareja en el momento que estaba por ser requisado, pero Díaz luego aseguró que el arma lo tenía en el carrito donde transportaba a su bebé.
“El arma lo llevaba yo, quiero que quede claro, lo llevaba en el carrito de mi bebé y disparé un tiro, uno solo y al aire, no disparé contra ningún policía”, aseguró la mujer. Y afirmó luego que “la policía disparó”.
La fiscal afirmó que Díaz y el menor de 17 años, tras el disparo efectuado hacia los uniformados, comenzaron a correr por la calle 35 hacia el barrio Peñi Ruca, abandonando a hijo de la mujer en su carrito. La persecución culminó cuando varios patrulleros llegaron hasta inmediaciones de calle 6 bis y 35.
Ivana Hernández también señaló que en el momento de la detención del joven de 17 años, éste rompió uno de los vidrios del móvil 2424. Este punto también fue rebatido por el defensor oficial Alejandro Caram, quienes señalaron que el menor ya se encontraba en el interior del patrullero, cuando una piedra arrojada por vecinos destruyó el vidrio.
Finalmente la fiscal imputó a Silvia Díaz de “tentativa de homicidio agravada, por ser cometido contra un miembro de la fuerza policial y por ser utilizada un arma de fuego”, para luego requerir que la mujer permanezca con prisión preventiva hasta la finalización del proceso, que culminaría en un plazo máximo de 10 días hábiles.
En el caso del menor de 17 años, Hernández formalizó acusación por “portación de arma de fuego de uso civil, daño simple y resistencia a la autoridad”. Mientras que sugirió que el joven permanezca detenido por 24 horas, para poner al menor a disposición del Juzgado de Familia y el Menor, desde donde se tramitaría una internación del acusado.
Por su parte, el defensor Alejandro Caram rechazó la acusación de “tentativa de homicidio” contra Díaz y consideró que su defendida debería ser juzgada por “abuso de armas”. Mientras que solicitó que la mujer sea internada por sus antecedentes con problemas de adicciones.
Finalmente, el juez de Audiencia Fabricio Lossi dio lugar a todo lo requerido por la fiscal Ivana Hernández, aunque recordó también a la representante del Ministerio Público Fiscal que, por tratarse de un juicio directo, el Código Procesal impide que la pena requerida exceda los 15 años de prisión.
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