En el encuentro, estuvieron el titular del Plan BelgranoJosé Cano, ex candidato a gobernador del APB; el secretario de Vivienda y Hábitat de la Nación, Domingo Amaya (ex candidato a vicegobernador del frente); el titular de la Secretaría de Aguas y Saneamiento Argentino (AYSA), Pablo Walter (PRO) y el diputado nacional Federico Masso (Libres del Sur).

También participaron Julio César Herrera y José Ricardo Ascárate (presidente y vicepresidente primero de la UCR Tucumán, respectivamente); Walter Berarducci (Presidente del Partido por la Justicia Social); Alejandro Ávila Gallo (Presidente del PRO Tucumán) y  Rolando Argañaraz (secretario general del PRO Tucumán). 

Además, estuvieron presentes José Páez (Democracia Cristiana); Mara Mockevich (Democracia Cristiana);Sandra Manzone (Coalición Cívica- ARI); Enrique Romero (Partido PERON); Esteban Jerez(Compromiso Federal); Oscar Gramajo (Partido Socialista) y Ricardo Salas (Partido Socialista).

Luego de la reunión, en contacto con la prensa, Alfaro explicó que “el anteproyecto de reforma política que debatió la comisión de trabajo del APB, incluye propuestas concretas como la creación de un juzgado electoral y la reforma de la ley de partidos políticos”. Además, indicó que el anteproyecto establece cuestiones como “la transparencia del financiamiento, el voto electrónico y las limitaciones a los acoples”, entre otros. “Todos estos temas vamos a continuar debatiendo. La próxima reunión será el martes de la semana que viene en el municipio de Yerba Buena”, anunció Alfaro. “También hemos dialogado con los funcionarios nacionales acerca del trabajo que están realizando ellos a nivel nacional y las soluciones que están trayendo a la provincia”, agregó el intendente de la Capital.

Por su parte, Cano explicó que “es importante la creación de un juzgado electoral independiente y una ley que reforme la ley de partidos políticos, para que terminemos con este carnaval de partidos en la provincia que son financiados por el oficialismo”. También señaló que es necesario “discutir los ejes que justificaban la reforma constitucional que convocó el propio Alperovich en el 2006, que son el voto electrónico y la autonomía de los municipios, que señalaba que cada municipio iba a dictar su propia carta orgánica”.

“Nadie le puede creer al oficialismo que está avanzando hacia un proyecto de reforma política, cuando estamos viendo acontecimientos como haber escondido durante un año el decreto donde designaban al ex gobernador como ministro ad hoc del Ejecutivo Provincial”, argumentó Cano. “También se habla mucho de la trasparencia, pero se limita todo lo que tiene que ver con el acceso a la información pública sobre los fondos que maneja el gobierno y existe discrecionalidad en la distribución de los recursos a los municipios y las comunas”, agregó.El ex candidato a gobernador de Tucumán por el APB, expresó que “el gobierno de Tucumán ya lleva un año al frente del Poder Ejecutivo, se convocó al ´Tucumán Dialoga´, se escuchó a las organizaciones de la sociedad y se creó una comisión”. 

En ese contexto, manifestó que es “una enorme hipocresía y contradicción”, que el Gobierno provincial, haya dejado pasar “la posibilidad cierta de aprobar la media sanción de la Reforma Electoral en el Senado de la Nación”. Cano precisó que “la propuesta del Ejecutivo Nacional, consensuada con gobernadores, es la boleta única electrónica, implementar un doble control en papel y a través de un chip electrónico del escrutinio y la penalización para las prácticas clientelares”.

“Hoy el gobierno de Tucumán tiene la enorme posibilidad de escuchar lo que el año pasado reclamó la sociedad tucumana que durante nueve noches se convocó para repudiar el sistema electoral”,  manifestó Cano.  “Es la oportunidad de que acompañen la votación en el Senado y demuestren efectivamente que una parte de la reforma política, que es la reforma electoral, ellos la van a avalar”, concluyó.

A su turno, Amaya remarcó que el encuentro de los referentes del APB busca consolidar el espacio político. “Tenemos que trabajar para fortalecer nuestro espacio como proyecto político y creo que la reforma electoral es el camino para la reforma política. La gente está esperando que a través de la reforma, la política empiece a mostrar que tiene principios y valores”, expresó el secretario de Vivienda y Hábitat. El funcionario nacional, además, resaltó que si se aplica la reforma, “en el pueblo argentino se terminaría con el voto cadena y marcado”. También “finalizarían las amenazas a la gente de que se les quitarán los módulos, los planes y el pan de cada día”.

Amaya se refirió a la posición del gobernador Manzur ante la convocatoria del Gobierno Nacional a debatir la reforma electoral.  “Manzur fue invitado por el presidente de la Nación a una reunión donde se trató el tema y faltó. Él tendría que haber ido para poder decir  ‘estoy de acuerdo en esto, no estoy de acuerdo en lo otro’, porque de eso se trata la democracia y la política. Se trata de que nos pongamos de acuerdo y no en que reciba una orden del senador Alperovich y que no vaya”, opinó Amaya. En relación a este tema, agregó: “Lo más triste es que llamaba a gobernadores del peronismo para que no vayan a la reunión. Cuando estos gobernadores estuvieron presentes y están totalmente de acuerdo de generar transparencia,  terminar con el fraude electoral y recuperar la institucionalidad”.

Por último, Pablo Walter, sentenció que “hace falta una reforma política integral, hace falta que Tucumán se ponga los pantalones largos, sobre todo escuchando a la gente, porque fue la gente la que reclamó esta transparencia”. El funcionario nacional agregó: “Lo que nosotros estamos propiciando es que Tucumán no quede como una isla de lo que está pasando en el resto del país”. 

En ese sentido, calificó como “un mamarracho”, el hecho de “que en el orden nacional  exista una ley que regule el financiamiento de la política, y que Tucumán sea una fiesta donde se sigan usando los recursos del Estado para financiar 600 partidos políticos”. Walter afirmó que “hay algunos a los que la soberbia les hizo perder la noción de que algo cambió en el país, de que ya no gobiernan los que gobernaban y que las formas cambiaron”. 

Manifestó que “hace falta diálogo y transparencia, y que se entienda que lo primero es la gente, no los intereses de los funcionarios públicos, más allá del color político que pueda tener cada uno”.