El interventor del PRO Rogelio Frigerio es criticado por radicales, massistas y hasta oficialistas. El excandidato radical a gobernador Benedetti lo acusa de la caída de su fórmula, pero su sector es el más favorecido en el reparto de los cargos
En una columna que publicó Atilio Benedetti el miércoles, sostuvo que la dirigencia del PRO se equivoca si cree que al ya candidato a gobernador Alfredo De Ángeli le bastará el arrastre de Mauricio Macri para ganar la elección en la provincia. No tiene mucho sentido, y menos en boca de Benedetti, imaginar que el radicalismo estará ausente de la campaña, al punto de pensar que al PRO solo le quedará el arrastre de Macri .
¿Por qué habría de estar ausente la UCR, y el sector de Benedetti en particular, siendo el principal y casi único favorecido del reparto de candidaturas legislativas? Este es un aspecto contradictorio del reciente armado de listas posterior al quiebre del frente electoral Cambiemos.
Tanto Benedetti como Adrián Fuertes, que fue su compañero en la fugaz fórmula desarmada antes de la inscripción de listas, abonaron la idea de que el benedettismo fue una víctima de Rogelio Frigerio. Incluso dirigentes del oficialismo aportaron a esta visión que parece indicar que el interventor del PRO, Rogelio Frigerio, es un porteño avivado y falto de palabra que saca ventaja de la candidez del paisanaje que anda en política.
El origen de la tensión
Las razones principales del quiebre entre radicales y macristas estaban claras de antemano. A riesgo de ser autorreferencial, hay que señalar que el domingo 17 de mayo en esta sección se publicó la nota “Indicios de la discusión que se viene en la relación UCR-PRO” que daba cuenta de ello. Básicamente Benedetti quería que los precandidatos a intendentes de la UCR pegaran solamente con su boleta de precandidato a gobernador, y no con De Ángeli. Ante esto, Frigerio le advertía que no permitiría entonces que él pegara su boleta con el candidato presidencial Macri. En ese momento había varios precandidatos a intendentes radicales que no estaban de acuerdo con Benedetti y el primero en marcar la cancha fue el paranaense Sergio Varisco, a quien Macri en persona ungió también como candidato del PRO. En este aspecto, no puede decirse que haya habido muchas sorpresas al momento de la ruptura.
Benedetti también explica que haber conformado una fórmula con el intendente de Villaguay le modificó la “perspectiva y los cálculos de algunos dirigentes que apelaron a la artimaña de modificar las reglas del juego, de romper acuerdos previos, de no respetar los compromisos asumidos”, refiriéndose a Frigerio claramente, sobre todo en lo de los compromisos asumidos (más allá de que alguno haya querido ver en esto un reproche al oficialismo por la última modificación de la ley electoral).
Y explica que declinó su postulación para permitir que los candidatos radicales a intendentes y legisladores “puedan participar en condiciones de disputa similares a las de los adversarios, de manera de asegurar triunfos que incrementen la cantidad de intendentes y de representantes en las cámaras legislativas”. (Está claro que para Benedetti la única forma de ganar es pegando con Macri).
El “renunciamiento” de Benedetti no contempló otras posibilidades. Pudo haberse sumado al otro candidato radical, Fabián Rogel, para evitar que la UCR llegara sin candidato a gobernador a la próxima elección. Pudo haberse atalonado con los candidatos radicales a intendente, desechando el pegado con el candidato a gobernador De Ángeli, sabiendo que el PRO carece de candidatos propios a intendente con chances ciertas de ganar las elecciones. No ocurrió nada de eso.
Los candidatos a intendente radicales fueron corriendo al Hotel Mayorazgo a sacarse la foto con Frigerio cuando este hizo sonar la campana. El enviado de Macri dice que eso terminó de descorazonar a Benedetti, quien -recordemos- dice que se bajó para garantizarle a los otros radicales el pegado con Macri.
Listas y negociación
La presentación de las listas ante las autoridades partidarias cerró el sábado 20 de junio. El jueves 18, cuando la tensión generaba un problema irresoluble, Benedetti se comunicó con el candidato esparring de Macri, el presidente de la UCR Ernesto Sanz, quien ya había mediado oportunamente por el ingreso de los massistas a la versión entrerriana de Cambiemos. Le contó que Frigerio le impedía el pegado con Macri y de su reclamo ante el interventor del PRO. Sanz le respondió: “Tenés razón, rompé el acuerdo y andá solamente conmigo como candidato presidencial”. Benedetti sabía que esa propuesta le restaba chances en las PASO y volvió entonces a hablar con el enviado de Macri.
Frigerio le dijo entonces a Benedetti que le permitiría pegar su boleta con la del candidato presidencial Macri siempre y cuando no llevara dirigentes del Frente Renovador en los cargos principales. El veto de Frigerio a los massistas apuntaba a Fuertes y al exgobernador Jorge Busti, pero especialmente al primero. Frigerio dijo que seis meses antes Fuertes le había pedido apoyo -incluso económico- para sostener su candidatura, con la promesa de apoyar luego a De Ángeli si no conseguía posicionarse en las expectativas electorales de los entrerrianos; y que ese eventual apoyo al exdirigente chacarero incluiría a Gustavo Zavallo, Busti y Emilio Martínez Garbino, entre otros dirigentes del sector. Según Frigerio, Fuertes faltó a la palabra empeñada acordando ir de candidato a vicegobernador de Benedetti, tal como se había anunciado públicamente el martes 16.
Frigerio también dijo estar molesto con Busti porque el exgobernador le había prometido trabajar por el macrista De Ángeli, diciéndole que “antes de apoyar a un radical para que llegue a la Casa de Gobierno” se cortaba las manos. Sin embargo, en este segundo caso no hizo manifestaciones tan ostensibles de su enojo. “Busti es así, ya sabemos lo que pasó en 2013”, indicó tal vez a sabiendas de que en el Frente Renovador se había abierto una grieta a raíz de la fórmula Benedetti-Fuertes, a tal punto de que ningún dirigente del sector acompañó al intendente de Villaguay en la presentación ante la prensa. Se supo que hubo momentos de tensión y Fuertes se limitó a decir luego que esperaba que el resto de la dirigencia massista lo acompañara en la propuesta.
A esta altura no hace falta explicar que el representante de Macri en Entre Ríos había puesto algunas fichas en los otros sectores del arco opositor.
Ante la disyuntiva planteada por Frigerio, de tener el pegado con Macri pero sin massistas en la lista, Benedetti optó por bajarse. Rogel, que seguía las negociaciones de cerca, entendió que al larroquense le habían desnudado el juego y dejó en vano el teléfono prendido, pensando que algunos sectores del radicalismo, empezando por el benedettismo, iban a llamarlo para acordar una propuesta radical única.
El comunicado de prensa dando cuenta de la declinación de Rogel estuvo redactado a las 19 del sábado, pero se envió a los medios poco antes de las 23, a la espera de ese llamado que nunca se produjo.
Los nombres y los lugares
Si se repasan las listas legislativas, se observa que al tiempo posterior a su bajada y antes del cierre, el sector de Benedetti parece haberlo usado para posicionarse en los mejores lugares de la lista de diputados y, a la vez, mandar al fondo a aquellos que inicialmente no le había hecho el aguante a Atilio.
El presidente del partido y del bloque de diputados, el benedettista Fuad Sosa, quedó primero en la lista de candidatos a diputados de Cambiemos. Tercero en la lista está Sergio Kneeteman, secretario y mano derecha de Atilio Benedetti. Quinta, la benedettista Gabriela Lena, actual vicepresidenta primera de la UCR y concejal de Chajarí, quien también fue candidata a senadora nacional en la lista que encabezó Benedetti en 2013. Vale señalar que en el segundo y cuarto lugar hay dirigentes del PRO.
El séptimo lugar le tocó a José Artusi, referente de la corriente benedettista Arturo Illia en Concepción del Uruguay. Artusi, junto al intendente de Villa Elisa Marcelo Monfort -también benedettista- habían criticado horas antes con dureza a los candidatos radicales a intendente que le hicieron el vacío a su jefe. Unas horas después, Monfort era inscripto como candidato a diputado nacional de la lista de De Ángeli.
La abogada paceña María Alejandra Viola (esposa del exministro de Economía Oscar Cachi Berón) y el actual diputado Jorge Monge, ambos benedettistas, se posicionaron en los puestos nueve y 11 de la lista para la Cámara baja provincial.
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