Nicolás del CañoFIT

Estrategia

Ninguno de los candidatos que participaron ayer del debate se salvó de las críticas de Nicolás del Caño. Desde su atril, el presidenciable del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) fue el más agresivo de todos los postulantes. Pagó los nervios iniciales, pero pronto se repuso y desplegó el repertorio de propuestas de izquierda. Insistió en temas económicos con el ajuste que preparan sus competidores cuando lleguen a la Casa Rosada, propuso legalizar el aborto y el consumo de drogas y reclamó fuertes mejoras en el salario de los docentes. Sorprendió en ese tema al asegurar que invertirá el 30% del presupuesto nacional en temas educativos si llega a ser presidente. Buscó vincular todo el tiempo a Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa como parte de un mismo modelo.

A Favor

Fue el más agresivo. En las mínimas instancias de cruce, hizo preguntas difíciles para todos sus oponentes. Le pegó a Macri por su gestión en Capital y atacó a Massa por el tema narcotráfico.

En contra

La tensión de su debut como candidato presidencial le jugó una mala pasada durante su primera exposición. Se sobrepuso rápido y, durante el segundo segmento, ya se lo notó mucho más suelto.

"Vamos a destinar el 30% del presupuesto nacional para educación"

Equipo

Estuvo acompañado por Myriam Bregman, su candidata a vicepresidenta, a la que nombró varias veces; Christian Castillo, candidato a gobernador bonaerense, y Noelia Barbeito, candidata a diputada en Mendoza.

Mauricio MacriCambiemos

Estrategia

El candidato presidencial de Cambiemos se centró en hablar de propuestas concretas, con datos específicos en cada tema, sin entrar en polémicas con los candidatos que lo atacaron, como Margarita Stolbizer en el caso de Fernando Niembro o Nicolás del Caño por el estado de la educación o los problemas de vivienda en la ciudad de Buenos Aires. Cuestionó a Daniel Scioli por su ausencia en el debate al afirmar que "no se sabe quién va a gobernar" si es que gana las elecciones. Cuando le tocó polemizar con Sergio Massa, el jefe de Pro le cuestionó los "tiempos" de sus promesas en materia de educación y sólo le respondió cuando éste lo atacó por poner "a tu padre, tu primo y tu mejor amigo" en relación con el Estado. Fue conciliador con el resto de los candidatos presidenciales.

A Favor

Después de un comienzo dubitativo, Macri se mostró más seguro y confiado en el debate.

Dio números y propuestas concretas en educación, economía y seguridad.

En contra

No respondió directamente por el escándalo de Fernando Niembro.

Se lo vio distraído en más de un pasaje y fue el único candidato que no permaneció de pie mientras hablaban sus rivales.

"Se ve que en el FPV están en problemas para definir quién gobierna. Le preguntaría a Scioli cómo va a hacer para gobernar"

Equipo

Estuvo con su esposa, Juliana Awada, además del secretario de Gobierno, Marcos Peña; el jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta; su candidata a vicepresidenta, Gabriela Michetti, y la candidata a gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal.

Sergio MassaUNA

Estrategia

Sergio Massa consiguió uno de sus objetivos al resumir, en cada bloque, los ejes principales de las propuestas de UNA. También, al mechar otras propuestas ante las preguntas de sus rivales, con los que tuvo un trato diferenciado: buscó emparentar a Mauricio Macri con el kirchnerismo al imputarle que su padre y otros familiares eran contratistas del Estado; marcó distancia con Nicolás del Caño cuando lo asoció con los piquetes "extorsivos" y lo trató de "mentiroso" cuando lo acusó de ausentarse en las sesiones de Diputados; con Margarita Stolbizer y Adolfo Rodríguez Saá, en cambio, destacó coincidencias.

A Favor

Logró materializar la ausencia de Scioli al pedir que se deje en silencio un bloque que le correspondía al gobernador. Logró así un golpe de efecto potente.

Se mostró firme y concreto al presentar sus propuestas y dio detalles cuando le tocó responder preguntas de otros.

En contra

No logró marcar distancia con Macri y, cuando lo enfrentó, apeló a una chicana.

Aunque respondió, las preguntas de Stolbizer y Del Caño lo pusieron en territorio pantanoso.

"Si me toca gobernar, quiero que sepan que el que tenga que ir preso va a ir preso, se llame como se llame"

Equipo

Acompañaron a Massa en el debate el gobernador de Córdoba y uno de los principales dirigente de UNA, José Manuel de la Sota; el economista Roberto Lavagna; el asesor de imagen Sergio Bendixen, y su esposa, Malena Galmarini.

Adolfo Rodríguez SaáCompromiso Federal

Estrategia

El único ex presidente dentro del aula magna de la Facultad de Derecho hizo gala de su experiencia en citas de alta tensión, aunque por momentos pareció demasiado parsimonioso y solemne. Se notó su aplomo para este tipo de citas desde el comienzo, con el que logró desarrollar buena parte de sus propuestas. Por momento, quedó preso de la situación en San Luis. Hizo referencia a muchas de sus iniciativas como un reflejo provincial y los únicos ataques que recibió fueron por conflictos en esa provincia. Provocó una de las pocas carcajadas que soltó el auditorio para desentenderse sobre un ataque a la gestión puntana: "Yo no gobierno San Luis, soy senador". Se sintió cómodo con los diálogos no agresivos que mantuvo con Macri y con Massa.

A Favor

El aplomo. Disimuló los nervios, estuvo tranquilo, habló pausado y fue claro para expresar sus propuestas.

Sorpresas. Se guardó para el medio del debate propuestas que llamaron la atención, como por ejemplo imitar a Uruguay en la problemática sobre la legalización de las drogas o su intención de crear un Consejo de Seguridad.

En contra

San Luis. A sabiendas de que el candidato iba a hacer hincapié en la gestión provincial, Del Caño y Stolbizer lo atacaron por cuestiones locales, muy alejadas de un debate presidencial.

No confrontar. El puntano sólo respondió dos críticas. Ni Macri ni Massa lo atacaron durante todo el debate. Por momentos fue demasiado lento y generalista para hablar, sobre todo en comparación con otros candidatos más directos.

"Vamos a votar para que elijan a dos de nosotros, los que vamos a ir a ballottage"

Equipo

Su compañera de fórmula, Liliana Negre de Alonso; su hermano Alberto, y el gobernador de San Luis, Claudio Poggi.

Margarita StolbizerProgresistas

Estrategia

Como había previsto, Margarita Stolbizer centró su estrategia para el debate en la exposición de su plataforma y propuestas de gobierno. Fueron pocas las oportunidades en las que emparentó al kirchnerismo con el macrismo para sugerir que "son dos versiones de lo mismo". Lo hizo al principio de la discusión, cuando le pidió a Macri explicaciones sobre el caso del ex candidato a diputado de Pro Fernando Niembro, que se vio envuelto en una denuncia de presunta corrupción. Stolbizer aprovechó las preguntas a sus otros adversarios para diferenciarse y destacar el ideario progresista que representa, con eje en la igualdad de oportunidades, la transparencia y la lucha contra la corrupción.

A Favor

La candidata de Progresistas fue punzante en las preguntas que lanzó a sus adversarios.

Expresó con claridad los ejes de su plataforma electoral.

En contra

No logró polemizar con Mauricio Macri, salvo por la primera pregunta. Hacerlo era uno de los objetivos que se había planteado.

Por momentos, a su discurso de propuestas le faltó impacto, anclaje cotidiano.

"Corremos el riesgo de que los que fracasaron en la provincia de Buenos Aires trasladen su fracaso al gobierno nacional"

Equipo

Acompañaron a la candidata presidencial de Progresistas en el debate la académica Beatriz Sarlo; Manuel Garrido, candidato a diputado nacional porteño; su compañero de fórmula, Miguel Ángel Olaviaga; su marido, Juan Carlos Laprovittola, y sus hijos Federico y Juan.