El pasado viernes, los directivos de la Clínica Chacabuco, mediante un comunicado enviado a los medios de prensa, se refirieron a las dificultades que mantiene con la obra social Pami, principal prestadora de servicios médicos a jubilados y pensionados de Tandil.
En la misiva explicaban que dejaban de prestar atención a los afiliados, excepto las urgencias, debido a la falta de respuesta a la problemática planteada a la obra social en reiteradas ocasiones.
Ayer hubo un primer encuentro, que fue breve, pero que al menos sirve para ilusionarse con una pronta resolución al conflicto suscitado.
Ricardo Saracca, como representante de la Clínica Chacabuco, se dirigió hasta el local que la obra social tiene en la calle Pinto. En diálogo con El Eco de Tandil sostuvo que “mucho no se puede decir porque fue un encuentro de pocos minutos. Nos atendió quien está como referente en Tandil y hablamos un poco. Luego recibí un llamado desde Pami Mar del Plata, la sección regional, donde me dijeron que este jueves podría haber una reunión en Buenos Aires”.
Consultado sobre si ese encuentro estaba oficializado expresó que “aún no, nos dijeron que tal vez pudiera concretarse esta reunión para tratar lo que está sucediendo en Tandil, pero no nos confirmaron nada. Me dijeron que me volverán a llamar para avisarnos”.
“Preocupa
el desborde”
Adolfo Loreal, presidente de la Comisión de Salud del Concejo Deliberante, habló sobre cómo se desarrolló el fin de semana en el sistema de salud de pública, teniendo en cuenta la restricción de atención para los afiliados a Pami en la Clínica Chacabuco.
El funcionario aseguró que “lo que intentamos desde el boque es tener una actitud no alarmista pero sí responsable. Pusimos de vuelta en conocimiento a los ciudadanos de una situación que se viene trabajando desde hace más de un año, donde se hizo un par de presentaciones desde el Concejo Deliberante alertando y pidiendo a Pami a nivel nacional, regional en Mar del Plata y local, incluso hasta en conversaciones que mantuvimos con Miryam Iglesias, porque teníamos las quejas de la Sociedad Italiana que iban en consonancia con dificultades en el Hospital Ramón Santamarina respecto de los modos de facturación”.
Manifestó que “la primera comunicación que sacamos desde el Concejo Deliberante fue solicitando a Pami tener alguna reunión para poder mediar en ese conflicto, buscando una pronta resolución. Parte de la oposición nos tildó de alarmistas en ese momento. Hubo un segundo pedido sobre fin de año que acompañaron todos los bloques, donde la Clínica Chacabuco dijo que en el mes de enero iba a suspender las prestaciones. Entonces ya no éramos alarmistas, la emergencia se acercaba y quedaban concretamente 15 mil afiliados sin prestación”.
Recordó que “esto se nos avisó sobre el mes de noviembre y Pami nos siguió ignorando como Concejo Deliberante, no recibiendo jamás una comunicación o un informe sobre las solicitudes que hicimos”.
Loreal también dijo que “sabemos que hubo una reunión en el mes de noviembre pasado donde citaron desde Buenos Aires a las autoridades de la Sociedad Italiana. Regresaron con una promesa por parte de Pami de dar una solución al conflicto. Con esa tranquilidad nos quedamos. La realidad es que no hubo resolución y hemos llegado al punto crítico”.
Preocupación
Ante la diezmada atención en la Clínica Chacabuco, aquellas personas que necesiten atención médica deben concurrir al Hospital Santamarina, el que podría tener una masiva concurrencia de pacientes.
Al respecto sentenció que “lo que preocupa es el desborde en salud pública. El Hospital tiene una capacidad de atención. Si desde la Clínica Chacabuco se deja de brindar el servicio a los afiliados, esas personas son posibles de demandar atención en el sistema público de salud, cuando esos afiliados tienen su obra social que es Pami y es quien debería darles respuestas”.
También remarcó que “afortunadamente el pasado fin de semana la situación estuvo bajo control, es decir todo lo que ocurrió en el Hospital quedó contenido. Las emergencias son siempre atendidas vía guardia, y además hay que mencionar que el Hospital tiene un plan B para atenciones en situaciones críticas, de emergencia o de catástrofe. Si hay una situación que tiende a desbordar se cuenta con otras salas como el anexo del Hospital de Vela, con disponibilidad de más camas y acuerdos con el área militar que también dispone de lugares de internación. De esto está al tanto el Intendente como todo el sistema de salud”.
Más allá de estar preparados, acotó que “esto no resta importancia y por eso estamos pidiendo reuniones con las autoridades de la Sociedad Italiana, porque nos preocupa la atención permanente del mayor. Estamos hablando de una población sensible que necesita una atención constante y no me parece que sea una solución que los mayores sean trasladados a otras ciudades”.
Por último señaló que “el Intendente ha pedido a la Secretaría de Salud que se envíe en forma urgente un informe a Pami central poniendo al tanto de esta situación y para que el área a nivel nacional se expida al respecto”.
Para Iparraguirre, “se genera un mal clima en muchas familias”
Rogelio Iparraguirre, concejal por el Frente para la Victoria y candidato en quinto término a diputado provincial en las próximas elecciones, expresó al respecto su preocupación, ya que “no es la mejor forma de hacer un anuncio la que eligieron las autoridades de la Clínica Chacabuco, porque estamos hablando de garantizar la salud para varios miles de ciudadanos. Imaginemos que cuando se genera un titular que menciona que la Clínica Chacabuco dejará de atender por Pami, se crea un mal clima en muchas familias”.
Sobre la situación en particular sostuvo que “viene del año pasado, en donde hay dos asuntos, que ninguno amerita anuncios de esta gravedad. Uno es diferencia de criterios respecto del sistema de liquidación que ya hace un año y medio tiene Pami. Hasta hace poco más de un año atrás directamente le asignaba, en el caso de la Chacabuco, una determinada cantidad de dinero. A partir de esa fecha empezaron a hacerse las liquidaciones por prestación, producto de las deficiencias que generaban los prestadores en el servicio donde cobraban igual y no se sabía si prestaban bien o no el servicio. Es un sistema que claramente en las reuniones que hemos tenido muestra bastante complejidad. Se ofreció por parte de la agencia nacional de Pami la capacitación a las personas de administración de la Clínica para que puedan entender cómo se hacen estas liquidaciones, que son muy complejas”.
“El otro tema -siguió- es la actualización de los montos, que es un círculo vicioso. En la medida que la Clínica Chacabuco no se adapta al nuevo sistema establecido por Pami, que es la agencia que le paga al prestador. Al no haberse adoptado este nuevo modo se van haciendo las retenciones, que es lo que plantean las autoridades de la Clínica y los montos se ven reducidos”.
En cuanto al dinero aportado en Tandil por parte de la obra social aseveró que “los montos totales enviados por Pami a la Clínica Chacabuco, de enero a agosto que es lo que podemos hablar, son casi 15 millones de pesos. Esto es algo superior a lo que ha sido 2014 y mucho más a lo que fue 2013”.
El concejal reflexionó que “estamos hablando de la salud de nuestros ancianos y vecinos, por lo que no se puede jugar con títulos espectaculares que generan realmente mucha angustia en miles de familias tandilenses”.
Acuerdo
Iparraguirre abogó porque se alcance un acuerdo en las reuniones que comenzaron a desarrollarse en la jornada de ayer. “Ojalá que a partir de la reunión mantenida entre las autoridades el servicio vuelva a la normalidad. Estamos a disposición para aportar en lo que sea, como concejal de la Comisión de Salud todo lo que esté en nuestro alcance. Hay que entender, en este caso, que como comisión del Concejo Deliberante lo único que por ahora puede es hacer buenos oficios, porque estamos hablando de una diferencia entre un prestador privado y la agencia estatal nacional que es la que paga las prestaciones”.
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