En junio del año pasado, el marplatense Julio César Durán quedó en el centro de la escena política y económica nacional, luego de que la presidente, Cristina Kirchner, lo criticara en cadena nacional y lo tildara de “abuelito amarrete” por interponer ante la justicia de Mar del Plata una medida cautelar contra el cepo cambiario.

Más de un año después de aquel insólito episodio, el abogado marplatense recuerda el momento y sostiene que “aún espera que la Presidente le pida disculpas”. Mientras tanto, sostiene que hoy en día “no le interesa comprar dólares”.

“Creo que fui el primero (en interponer una medida cautelar). Procuré comprar u$s10, 5, 1, y después de eso intenté con otras monedas. Y en todas salía inconsistencia en la posibilidad de comprar. Ante ese atropello, que me parecía mayúsculo, porque eran $50, pensé: “Me decretaron la indigencia de hecho”. Entonces me pareció correcto, ante el avasallamiento de mis derechos, porque me parecía injusto, interponer la medida”", dijo Durán en diálogo con El Cronista Comercial.

Ante la frase de la presidenta afirmó: “Yo no me sorprendí: ¡Se sorprendió el mundo entero! A mí me han llamado de diferentes partes del mundo, porque es un hecho inusitado que un primer mandatario apunte a un ciudadano porque le disgusta tal o cual actitud que no fue para nada ilícita. No existe en los anales de otros países”.

Afirmó que creía que los dichos de la mandataria fueron “desafortunados”, pero dijo que creía que “las personas se equivocan o pueden estar agobiadas por las tareas que les tocan manejar”. “Yo creo que merecía una disculpa y la estoy esperando. No se la pido, la estoy esperando; yo ya la perdoné y se lo digo, porque las personas suelen equivocarse y creo que son más grandes cuando perdonan”, agregó.

Reveló, asimismo, que no volvió a intentar comprar la divisa norteamericana. “Escucho a diario de las trabas que hay, y no hay para nadie. O tenés que justificarlo muy bien porque te vas de viaje. Pero como yo no me voy de viaje, me arreglo con los pesos que andan bien”, dijo.

Ahora a sus nietos les regala “cualquier cantidad de cosas”. “Pero esto no pudo ser, y quedó en el anecdotario. Si uno les pregunta: ‘¿Qué es un dólar?’, no saben qué es eso”, aseguró.

Sobre la medida cautelar, dijo: “Se incorporó en el fuero correcto, que es el Federal. Pasó a la Cámara, que no hizo lugar al pedido de apelación de la AFIP, volvió al origen y ahí está, en auto para sentencia. Yo no creo que sea el momento procesal oportuno, ni políticamente oportuno, ni quiero sacar leña de este árbol, no es un tema que me interese o no, me tiene sin cuidado”.