El presidente del Ente Municipal de Obras y Servicios Urbanos (Enosur), Eduardo Abud, presentó ayer ante la comisión de Hacienda del Concejo Deliberante el presupuesto que manejará el organismo a su cargo durante el ejercicio 2016. Lo hizo poniendo especial énfasis en describir la situación en la que encontró a la dependencia y advirtiendo que durante este año su gestión estará dedicada a “administrar miseria” debido a la escasez de recursos y a la obligación de afrontar el pago de las deudas generadas por varias de las obras públicas iniciadas en el transcurso del año pasado.

Además, destacó que su área también está haciendo frente a la cancelación de algunos otros gastos del ejercicio 2015 vinculados a la prestación de servicios tales como la disposición final de residuos.

Los reproches de Abud, quien también mencionó carencias en materia de insumos y de equipamiento, fueron contrastados por el concejal de Acción Marplatense, Santiago Bonifatti, quien señaló que la situación descripta por el funcionario “no se condice” con el contenido de un presupuesto al que calificó como “ambicioso y extraordinario” debido a su magnitud.

En rigor, el cálculo de gastos y de recursos del Enosur para este año asciende a los 821 millones de pesos, cifra que representa más del 16% del total del presupuesto previsto para este año para toda la Municipalidad.

Al momento de contestar preguntas, Abud dejó que ese rol lo ocupara la contadora del ente, María Laura Maraschini, quien en más de una oportunidad se excusó de dar precisiones por no disponer de la información requerida por los concejales.

En un pasaje de la reunión, por ejemplo, la funcionaria no supo explicar cuál sería la evolución de los ingresos provenientes del Fondo de Financiamiento Educativo que envía la Nación o de los aportes que supuestamente realizará la Provincia de Buenos Aires para financiar obras y trabajos de mantenimiento.

“Eso lo sabe Cano”, respondió, indicando que los detalles de esta información sólo los conocería el actual secretario de Economía y Hacienda.

“El nos pasó los números y en el Ente lo tomamos para incluirlos en el presupuesto”, dijo.

Los recursos que llegarían al Enosur por estas dos vías no serían menores ya que entre ambos, explicarían casi el 32% de los ingresos totales que tendría el organismo este año.

En el caso del Fondo de Financiamiento Educativo, la cifra prevista asciende a los 102 millones de pesos, mientras que los giros de la Provincia originados en créditos podrían ascender a unos $158 millones, según se reconoció ayer en la reunión.

De hecho, buena parte de los gastos en obras previstos por el Ente se basan justamente en el uso de estos dos recursos. Con el Fondo Educativo, por ejemplo, está previsto ejecutar trabajos de ampliación y mantenimiento en distintas escuelas locales pertenecientes al municipio.

Por otro lado con los fondos que eventualmente gire la Provincia serían financiadas otras obras, entre las cuales figura como la más importante el “traslado del edificio municipal” a la nueva sede de la avenida Libertad, con una inversión de $49 millones.

A esto le sigue un listado de proyectos diseñados durante la gestión del ex intendente Gustavo Pulti, donde figuran la construcción del Vacunatorio y obras en salas de salud como las de Batán, Alto Camet y Estación Camet, entre otras.

Un punto llamativo sobre el cual el concejal Bonifatti ayer puso la lupa fue la existencia de dos partidas de gastos relacionadas con inversiones para la Dirección de Transporte y Tránsito.

Es que mientras que en un ítem del presupuesto se señala que se hará un “nuevo edificio en la calle Libertad” por un monto de $5 millones, en otro se indica que se invertirán casi $9,4 millones en un edificio para Transporte y Tránsito. Ante la consulta, los funcionarios no supieron explicar con certeza las diferencias existentes entre estas dos partidas -las cuales, aparentemente, apuntarían a lo mismo- aunque prometieron acercar información para esclarecer el tema.

Lo mismo respondieron cuando se les preguntó cuál era el significado de una partida de $8 millones que indica “ampliación del Parque Industrial (BID”.

En definitiva, quedó en claro que a pesar de que el Enosur manejará este año uno de los mayores presupuestos dentro de la administración municipal, su cumplimiento dependerá de los recursos que eventualmente lleguen desde otras jurisdicciones y de la capacidad de los funcionarios para gestionarlos. Ayer Maraschini se encargó de interpretar las palabras de Abud cuando señaló que su función consistirá en “administrar miseria”.

Según dijo, cada una de las inversiones previstas se podrán hacer en la medida en la que el Ente reciba los fondos adicionales previstos, debido a que los recursos corrientes estarán dedicados casi en su totalidad “al pago de sueldos y de deudas”.