Por un pedido ingresado administrativamente por la “Red por la apertura del polideportivo Camet”, que articula a las comunidades educativas, ongs y vecinos, la comisión de deportes del Concejo Deliberante sesionó en el barrio. Allí, vecinos y concejales opositores le reclamaron al ejecutivo municipal que asuma el compromiso político para que ese espacio pueda ser un lugar de inclusión deportiva y cultural.
El reclamo vecinal viene adoptando formas de lo más variadas y creativas. Buscan, que el ejecutivo municipal concrete su promesa de finalizar la obra e inaugurar los polideportivos que quedaron abandonados con el cambio de gestión: tanto el del Barrio bernardino Rivadavia (centenario) como el del Parque Camet.
Desde reuniones a volanteadas en eventos deportivos de gran convocatoria, los vecinos intentaron todo tipo de reclamo pacífico. “la necesidad de la apertura del polideportivo es imperiosa” explicaron, ya que las 9 instituciones educativas de gestión pública de la zona (entre jardines de infantes, primarias y secundarias; municipales y provinciales), tienen condiciones edilicias precarias, y no cuentan con gimnasios cerrados donde poder dictar educación física, materia que en consecuencia fue suprimida de hecho en la currícula. “Esto vulnera los derechos de las chicas y chicos que componen la matrícula de las escuelas de la zona”, explican desde la defensoría departamental.
La concejala Claudia Rodríguez, de Acción Marplatense, explicó que el problema no son los fondos sino la decisión política: “Mac Allister había garantizado los 10 millones necesarios para culminar las obras, pero Volponi (titular del EMDER) se negó a gestionarlos argumentando que no era su incumbencia, sino de Guillermo De Paz, titular de la cartera local de obras. Por otra parte, De Paz realizó gestiones con la provincia para obtener los fondos, pero desconocemos en que estado está dicha negociación. Lo que queremos son respuestas claras para los vecinos”.
Guillermo De Paz, citado a la reunión de comisión para brindar explicaciones al respecto no pudo estar presente, y fue en su lugar un funcionario de carrera (imposibilitado de asumir compromisos que son de carácter político). El funcionario explicó que de firmarse el acuerdo que se está dialogando con la empresa constructora, el polideportivo podría llegar a inaugurarse en un plazo de 5 meses, pero la realidad es que el acuerdo aún no fue rubricado.
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