Ayer por la mañana se realizó una Misa de Acción de Gracias en el gimnasio del establecimiento educativo, y posteriormente tuvo lugar una serie de actividades en el marco de los festejos por las Bodas de Oro de la institución.
En la oportunidad se encontraban presentes el intendente José Inza; el secretario de Salud, Néstor Cousté; el director de Deportes y Recreación, Federico Saldaño, el jefe de ANSES, Omar Seoane; ediles, ex concejales; la inspectora Jefe Regional de DIPREGEP, profesora Graciela Rodríguez; la inspectora Jefe regional de Gestión Estatal, profesora Anahí Carbone; la inspectora Distrital de Gestión Estatal, Bettina Ferreira; representantes de la Congregación de los Hermanos de la Sagrada Familia; inspectores de Educación de gestión oficial y privada de todos los niveles educativos; la decana de la Facultad de Agronomía, Liliana Monterroso; autoridades eclesiásticas, judiciales, militares y policiales; ex representantes legales; docentes jubilados; ex alumnos; representes legales; directivos; docentes; alumnos; padres; personal auxiliar; banda militar y público en general.
El Obispo Hugo Manuel Salaberry presidió la Misa de Acción de Gracias, por los 50 años del establecimiento educativo.
Asimismo, como es habitual, el acto estuvo acompañado por los abanderados y escoltas de los 3 niveles educativos de la institución, acompañados por sus respectivos docentes.
Primeramente se entonó el Himno Nacional Argentino, con el acompañamiento de la Banda Combate de Perdiel del Regimiento Húsares de Pueyrredón.
A continuación, el Padre Mauricio Scoltore bendijo las placas recordatorias que serán colocadas en los próximos días en la hall de ingreso de la escuela. Las mismas son presentes de la comunidad educativa del Colegio y de la Unión de Padres de Familia.
La vicedirectora del Nivel Primario, Ana María Messineo de Traina, representó el sentir de todo Sagrada Familia en las palabras alusivas a la eelebración. Las mismas se expresan a continuación:
“Hace 50 años, en los inicios de marzo de 1962, sonó por primera vez el timbre que marcaba la entrada a clase en el Colegio Sagrada Familia. 48 alumnos varones -de 1ro a 4to grado- y hermanos de la Congregación, en un sueño que se hacía realidad se dan visita en el patio del Colegio concretando para ellos y la comunidad la creación de nuestro establecimiento, respondiendo de esta manera a una gran necesidad. Con el correr de los años, este querido Colegio fue creciendo en matrícula, surgiendo después el Nivel Secundario, que más tarde se transformó en mixto y, posteriormente, en Nivel Inicial, llegando al presente con una matrícula mixta total institucional de 1210 alumnos.
Nuestro Señor Dios siempre estuvo presente en esta hermosa empresa que nos lleva de la mano en el camino que diariamente recorremos con la intención y el empuje de trabajar y seguir trabajando, transitando en la ruta de la enseñanza como hasta ahora. Recordemos que hay 3 cosas en la vida que una vez que pasan no regresan más: el tiempo, las palabras y las oportunidades. Hay tres cosas en la vida de gran valor: el amor, la familia y los amigos. Y hay tres cosas en la vida que forman a una persona: la sinceridad, la fe y el compromiso y el trabajo arduo...”.
Después, Carlos Vignau, en carácter de ex alumno, refirió su experiencia y su sentir hacia el Colegio.
Más tarde, el hermano Abel y el hermano Valentín, en representación de la Congregación de los Hermanos de la Sagrada Familia, ofrecieron también su expresión sentida. También en carácter de ex alumno, Oscar Alabart ofreció su testimonio, recordando sus vivencias en el establecimiento educativo.
La vicedirectora del Nivel Primario, Ana María Messineo de Traina, refirió las palabras alusivas por parte de la institución.
En representación de los estudiantes, tres alumnos de la escuela narraron una reseña histórica de la misma. Además, se destacó a tres alumnos que enorgullecen a todo SAFA de modo particular, porque correspondiendo al llamado del Señor se consagraron a Él como sacerdotes de la Diócesis de Azul: ellos son Carlos Enrique Garciarena, José María Ramos y José María Quattroccio.
Tras esto, se les entregó un recordatorio a los hermanos Adelcio y Valentín, de la Congregación de la Sagrada Familia.
Ya avanzadas las etapas previstas en esta celebración tan especial para este Colegio azuleño, fue destacada la labor del sacerdote Guillermo Fabián Di Pascuale, quien acompañó como asesor espiritual a la comunidad educativa, por su compromiso al crecimiento del Colegio y 16 años de entrega. Después, hubo un nuevo reconociemiento: al Padre Mauricio Scoltore, quien mostró genuina gratitud por dicha consideración.
Más adelante se mencionó a los sacerdotes de la Parroquia San Antonio de Padua, quienes evangelizaron a los alumnos durante muchos años; se recordó aquellos que ya no están entre nosotros.
Los alumnos del Colegio Sagarada Familia, con su banda musical, entonaron la canción aniversario, con la proyección de imágenes de la institución en una pantalla montada para la ocasión. Asimismo, la profesora Graciela Rodríguez hizo algunas referencias respecto a la comunidad educativa.
Por último, se cortó la torta aniversario, se cantó el Feliz Cumpleaños, culminando el acto en horas del mediodía.
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